En Canarias se crearon 15.600 empleos a lo largo del tercer trimestre de este año. Los 815.500 ciudadanos que hoy tienen trabajo suponen un volumen al que no se llegaba desde el final del año 2008, cuando los efectos negativos de la crisis comenzaban a dejarse sentir. La parte amarga de la noticia estriba en que la mayor parte de este avance se sustenta en puestos de trabajo temporales, cuestión en la que incidieron ayer tanto los sindicatos como la vicepresidenta y consejera de Empleo del Gobierno de Canarias, Patricia Hernández.
Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Archipiélago tenía al final de septiembre 286.700 desempleados, 14.100 menos (-4,70%) que tres meses antes y 30.500 menos (-9,61%) que hace un año.
La tasa de paro canaria quedó en el 26,01%, a más de siete puntos del 18,91% que anotó el conjunto de España y que supone el porcentaje más bajo de los últimos seis años. En todo el país buscan empleo aún 4.320.800 personas, 253.900 menos que al inicio del verano. También la temporalidad se revela como pilar fundamental de esta mejoría, en este caso claramente sustentada por el incremento de la actividad turística durante la época estival. Solo Murcia y el País Vasco no siguieron la estela positiva; en el resto de las comunidades autónomas el paro se redujo.
Centrando el análisis en la evolución del mercado laboral de las Islas durante el tercer trimestre, llama la atención la ausencia de homogeneidad en el reparto de las buenas noticias. Tanto es así, que 4.200 asalariados con contrato indefinido perdieron su empleo y fueron los 22.100 trabajadores que lograron firmar un contrato temporal los que inclinaron la balanza hacia el lado positivo. La tónica es la que siguió toda España, donde se extinguieron 29.000 relaciones laborales sin fecha de caducidad y cobraron vigencia 245.900 empleos que sí la incluyen.
Patricia Hernández responsabilizó de este fenómeno a la reforma laboral aprobada por el PP en 2012, que, en su opinión, debe derogarse con urgencia. Por contra, la vicepresidenta sí resaltó en la vertiente amable del análisis la consolidación del empleo a jornada completa entre julio y septiembre, con un incremento de 16.900 ocupados. En ese tiempo, se redujo en 1.400 el número de quienes desarrollan su labor a tiempo parcial.
Desde el sindicato CCOO, se reclamó la apertura de un proceso negociador capaz de recuperar "empleo estable y con derechos". Mientras, UGT rechazó la implantación del empleo de baja calidad "como un hecho normal" y alertó de que los trabajadores de las Islas se ven "condenados a ese tipo de contratos", en referencia a los temporales.
Desde la otra orilla, la patronal de la provincia de Santa Cruz de Tenerife -CEOE- celebró los datos que describen una mejoría global e incidió en el crecimiento de los asalariados del sector público, que son hoy 15.500 más que hace un año. Las organizaciones empresariales se quejan de que mientras los negocios privados han acometido ajustes por la crisis, las administraciones no se han reducido en la misma proporción.
Por su parte, la Confederación Canaria de Empresarios (CCE) señaló una posible aceleración de la mejoría del mercado laboral en el corto plazo. Esta se basará en la campaña navideña y el inicio de la temporada de invierno, la de mayor actividad para el turismo en el Archipiélago.
Diferencias entre provincias
En los últimos doce meses, el comportamiento del desempleo en las dos provincias canarias resultó parejo si se tiene en cuenta el número de parados que tiene cada una de ellas; mayor en Las Palmas (151.900) que en Santa Cruz de Tenerife (134.700). Sin embargo, en el último trimestre analizado por la EPA, fue esta última la que recabó los mejores datos.
En las cuatro islas occidentales (Tenerife, La Palma, El Hierro y La Gomera), se crearon 13.500 puestos de trabajo, por solo 2.000 en las tres orientales (Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote). Eso determinó que el volumen de desempleados adelgazara en solo 2.700 unidades en Las Palmas y en 11.400 en Santa Cruz de Tenerife.
La comparación con el tercer trimestre de 2015 corrige, sin embargo, este heterogéneo reparto de la mejoría. Las Palmas tiene hoy 12.100 empleos más que hace un año y 17.600 parados menos, mientras que Santa Cruz de Tenerife tiene 9.900 puestos de trabajo más y 12.900 ciudadanos menos en situación de desempleo.
Al buen comportamiento del mercado laboral entre los meses de julio y septiembre se sumaron todos los sectores de la economía. La agricultura ofreció empleo a 4.700 canarios; la industria, a 3.700; la construcción, a 3.600, y los servicios, a 3.400. Todos ellos registraron moderados recortes de las cifras de parados, pero el mayor se lo anotó el colectivo de quienes buscan su primer empleo o hace más de un año que perdieron el último que tuvieron. Al terminar septiembre eran 8.600 menos que tres meses antes.
También se contrajo con intensidad la tasa de paro de los menores de 25 años. Lo hizo en más de seis puntos, pero no logró bajar del 50%, se quedó en el 51,42%.
