El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, avanzó ayer que trabaja en un plan para flexibilizar la prohibición de aplazar deudas tributarias a pymes y autónomos y que baraja penalizar fiscalmente a las empresas morosas con sus proveedores.

En una comparecencia en la Comisión de Hacienda del Congreso de los Diputados, Montoro expuso las principales líneas en las que trabaja su departamento, entre las que destaca la elaboración de unos Presupuestos Generales del Estado para este año que prevé consensuar con los grupos parlamentarios.

El ministro defendió las últi-mas medidas tributarias aprobadas, entre las que figura la prohibición de aplazar las deudas tributarias, lo que despertó el rechazo de autónomos y pymes, que a menudo los utilizan como financiación. A este respecto, Montoro avanzó que la Agencia Tributaria trabaja en la elaboración de un procedimiento para evitar que esta medida perjudique a las em-presas "que tienen un facturación de IVA [no aplicable a Canarias] más baja", fundamentalmente autónomos y pymes.

Avanzó también que el Gobierno prevé poner en marcha medidas para combatir la morosidad empresarial, entre las que podrían figurar "penalizaciones en materia tributaria" para las compañías que paguen a sus proveedores en plazos mayores que los establecidos por ley.

El ministro incidió durante su discurso que 2017 será un año difícil que requiere unos presupuestos exigentes, ya que habrá que pasar de un déficit público del 4,6 % al 3,1 % del producto interior bruto (PIB), lo que supone un ajuste de unos 16.000 millones de euros. No obstante, no serán necesarias nuevas medidas presupuestarias para cumplir con esta meta, sino que bastará con materializar las ya aprobadas. En ese sentido, subrayó que ve una recuperación "saludable", como prueba que la recaudación por IRPF y por IVA de 2016 superará la de 2007 y sumará unos 134.9000 millones de euros.