El ministro de Economía, Luis de Guindos, afirmó ayer que el Gobierno no va a retrasar la edad de jubilación "más allá" de lo acordado con el ejecutivo del PSOE en 2010, cuando se decidió prorrogarla de forma "gradual" hasta los 67 años.

Sus declaraciones llegan después de que el Gobernador del Banco de España, Luis María Linde, señalara que el retraso de la edad de jubilación "podría estar justificado" para garantizar la sostenibilidad del sistema público de pensiones, y puntualizara que ésta era una medida que habían adoptado muchos países en los que la edad de jubilación dependía de la esperanza de vida.

Luis de Guindos recordó que el Gobierno ya está trabajando en esta línea. De hecho, la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ya afirmó antes de ponerse en marcha la nueva legislatura que el compromiso del Ejecutivo de Mariano Rajoy era hacer compatible el cobro de la totalidad de la pensión con un empleo.

Así, Guindos subrayó que la esperanza de vida en España es cada vez más larga, por lo que resaltó que alguien después de los 67 años con las condiciones y los incentivos fiscales necesarios puede trabajar si así lo desea. Para el ministro, hasta que no se incremente el empleo en 1,5 millones de personas, no se podrá decir que España ha salido "completamente" de la crisis, a pesar de que el país sí que está en un periodo de recuperación económica.

El ministro también defendió que la reforma laboral está ayudando a "generar mucho empleo".

Por otro lado, apuntó que "uno de los principales problemas que tiene España son los parados de larga duración, que no tienen la formación que se demanda". "Hay que invertir en formación para que sean demandados y encuentren empleo", añadió.