La campaña de la lucha contra el fraude cerró 2016 con la obtención de 14.833 millones de euros para Hacienda, casi un 5% menos que en 2015, año histórico en el que se sumó 15.664 millones. El director de la Agencia Tributaria, Santiago Menéndez, subrayó ayer que los resultados suponen mejorar en más de 1.900 millones los resultados obtenidos un ejercicio antes. Y eso sin contar los expedientes singulares, que ascendieron en 2015 a 2.709 millones, con lo las cifras de 2016 mejorarían hasta un 15% los datos del año anterior.

La recaudación se desglosa en ingresos directos procedentes de actuaciones de control, que suman 9.533 millones de euros, un 1,6% menos que doce mese atrás, y la minoración de devoluciones solicitadas por los contribuyentes, que totalizaron 4.846 millones de euros, un 11,9% por debajo del ejercicio anterior. Para Menéndez, los datos cosechados son "muy positivos", si bien aseguró que la lucha contra el fraude aún "no ha tocado techo". Es más, advirtió que las labores de inspección y control no cesarán sobre aquellos que lleven a cabo actividades a espaldas de la ley. "Allí donde haya economía sumergida, iremos", sentenció. Los ingresos de la Agencia Tributaria por la lucha contra el fraude se completan con 504 millones procedentes de declaraciones efectuadas fuera del plazo voluntario, un 6,02% más que el resultado obtenido un año antes, sin necesidad de que haya requerimiento previo por parte del Fisco.

Por otro lado, las actuaciones de entrada y registro realizadas por el Departamento de Inspección con el apoyo de personas de las Unidades de Auditoría Informática, alcanzó las 2.021, un 24% más que el año anterior. Si se toma como referencia 2012, se deduce que este tipo de acciones se han duplicado.

De igual forma, resaltan las visitas presenciales en sectores de riesgo fiscal. En esta actividad, directamente centrada en la detección de economía sumergida, se realizaron 24.491 actuaciones, un 12% más que en 2015, destacando el aumento del 49% de las destinadas a aflorar alquileres opacos. De hecho, Hacienda detectó 8.160 alquileres no declarados en 2016.