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Rodrigonsa refuerza su expansión a la Península con nuevos productos

La empresa canaria, que al año produce 900 toneladas de mantequilla y 1.000 de mortadela, coloca sus referencias en 165 puntos de venta de Carrefour y Alcampo

La empresa canaria de alimentación Rodrigonsa emprende una nueva andadura. La compañía presidida por Antonio Rodríguez refuerza su presencia en la Península con la introducción de nuevos productos y la ampliación de los puntos de ventas en este mercado de la mano de Carrefour y Alcampo. El objetivo, según expuso el cogerente Luis Alberto Rodríguez, es duplicar la facturación actual de la empresa -unos 15 millones de euros anuales- en cuatro años. La comercialización de nuevos artículos en el Archipiélago también contribuirá en la consecución de esta meta.

Moisés Rodríguez, padre del actual presidente, fundó en 1943 la empresa para producir y exportador hortalizas, pero a mediados de los años 60 ésta diversificó su actividad hasta convertirse en una industria del sector alimentario dedicada al envase y distribución de productos, principalmente lácteos y embutidos con marcas como La Irlandesa, en el primer caso, o Citterio, en el segundo. Hace apenas tres días, Rodrigonsa embarcó un contenedor con 40 piezas de mantequilla y mortadela que serán recibidas en la planta central que Carrefour tiene en la Península.

La compañía canaria ya estaba presente en el mercado peninsular con la comercialización de la mortadela y mantequilla a través de los establecimientos de Alcampo y la venta de mantequilla en algunos centros de la red de Carrefour. Con la puesta en marcha del plan de expansión, Rodrigonsa aumenta el número de tiendas en los que está presente en la Península a la vez que amplía la variedad de surtidos que ofrece. Así, los consumidores peninsulares podrán encontrar la mantequilla La Irlandesa en los lineales de 165 puntos de venta, de los que 120 ofrecerán cuatro referencias y otros 45, siete. La mortadela Citterio, cuya representación corresponde a la empresa canaria, se venderá, por su parte, en 160 establecimientos. La empresa también mantiene negociaciones con El Corte Inglés para introducir sus artículos en los puntos de venta que tiene en el resto del país.

Lanzamiento de artículos

La mantequilla con sal marina de Lanzarote -procedente de las salinas de Janubio-, y la de ajo y perejil son los nuevos artículos que Rodrigonsa ha ideado con un formato especial para su introducción en el mercado peninsular. A ellos se sumará en breve la mantequilla con mojo picón, elaborada con una receta original. Estas mismas referencias también estarán disponibles en Canarias, región en la que la compañía comercializa sus productos en todas las cadenas.

Pero los planes de expansión no terminan ahí. Rodrigonsa introducirá leche irlandesa en el Archipiélago a finales de mayo. Antonio Rodríguez, durante su intervención ayer en el acto de presentación de los proyectos más inmediatos de la empresa, destacó que las vacas de este país pastan al aire libre casi todo el año. "Son happy cows (vacas felices)", comentó entre risas. La nueva experiencia láctea no se limitará a la importación de leche líquida entera, semidesnatada y desnatada, sino también a la comercialización de nata de cocina y de postre.

La mantequilla ligera es otro producto en desarrollo que también "estará a disposición en breve para aquellos que quieran cuidar la línea". El cogerente reconoció que el mercado de la leche en Canarias está "saturado", pero destacó la calidad del producto como baza para alcanzar el éxito. "Y si el viaje es interesante y hay una proyección de futuro, intentaremos expandirnos", agregó.

Rodrigonsa produce al año 900 toneladas de mantequilla en diferentes formatos a partir de la materia prima que viene a granel en porciones de 25 kilos. En cuanto a la producción de la mortadela, al cierre de cada ejercicio la compañía contabiliza casi mil toneladas. Tanto en lácteos como en embutidos, la compañía abarca más del 50% de la cuota de mercado.

La empresa canaria cuenta con unas 150 referencias y 75 personas entre Gran Canaria y Tenerife. En la primera isla Rodrigonsa tiene la nave de producción en el polígono de El Sebadal, mientras que en la segunda cuenta con almacenes y oficinas. Si el plan de expansión logra los objetivos planteados, la compañía no descarta ampliar la plantilla y sus instalaciones.

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