¿Aguantará mucho tiempo más el sector financiero este escenario de tipos tan bajos?
Es muy difícil. Cometió el error de pedir insistentemente al Banco Central Europeo (BCE) que llevase a cabo políticas de estímulo monetario y ahora se está dando cuenta de lo devastador que es para ellos. Es muy importante que los tipos de interés estén en niveles razonables.
¿Qué tiene de nocivo que estén en niveles tan reducidos?
Si están demasiado bajos, incentivan el sobreendeudamiento y la inversión en sectores de muy baja productividad. Además, ponen en peligro la economía real si el sector financiero continúa debilitándose.
¿Es asumible una deuda como la española del 100% del PIB ?
Lo es si no ponemos escollos a crecer y crear empleo.
¿Cómo se puede reducir?
Solo se logrará reduciendo gastos. Por la vía de aumentar ingresos, no es factible; eso siempre lleva a gastar más.
¿Vislumbra el inicio de esa reducción de la deuda?
Llevamos tres años consecutivos con el nivel de deuda sobre PIB estancado, sin aumentos relevantes. Si se reduce el déficit, como tenemos en nuestros objetivos, y crecemos, el ritmo de reducción se acelerará; ahora bien, la deuda total seguirá creciendo.
¿A qué se refiere?
Los ciudadanos parecen no entender que reducir el déficit no significa reducir la deuda, sino tan solo el ritmo al que esta aumenta.
¿España está ya preparada para la retirada progresiva de los estímulos del BCE?
Claro que sí. La deuda de las familias y las empresas ha bajado a niveles de 2006, el consumo no parte del crédito, la economía está mucho más orientada hacia el exterior, las exportaciones están en niveles récord, prácticamente tenemos superávit comercial... Todos esos son factores de fortaleza que demuestran que estamos mucho mejor que en 2008.
¿Es preocupante para el consumo la pérdida de renta de los trabajadores?
Lo es, pero estamos hablando de la renta de los trabajadores desde una perspectiva equivocada, la de forzar que suban los salarios cuando no está aumentando la productividad. Lo que hay que acrecentar es la renta disponible de los trabajadores. Un mileurista neto en España es casi un dosmileurista bruto. Entre lo que paga la empresa, lo que paga el trabajador, el IRPF..., es que se detrae prácticamente el 45%. La política a seguir no es la de continuar aumentando los impuestos y decir que tienen que subir los salarios, sino lograr que una persona que cobra 1.800 euros brutos no sea un mileurista, que aumente el dinero que entra en su bolsillo.
¿Es posible atraer a España multinacionales radicadas en la City de Londres tras el brexit ?
Claro que lo es, no tenemos nada que nos haga peores que otros. Lo que no podemos pensar es que las empresas tienen que venir por nuestra cara bonita o porque les estamos dando el privilegio de venir. Si ponemos todo el empeño, vendrán. Es un objetivo común del Estado, las comunidades autónomas y los ayuntamientos.
Usted es comisionado de la Comunidad de Madrid para este asunto. ¿Algún resultado?
Todavía no tenemos brexit, no sabemos cuál va ser el marco de convivencia que va a tener la Unión Europea con el Reino Unido. Ni siquiera sabemos qué va a pasar en las elecciones generales británicas. Nadie está tomando decisiones y mucho menos públicas. La City no va a desaparecer, pero veo una oportunidad enorme de que muchas de esas empresas desarrollen parte de su actividad fuera de Londres.
¿Contactos discretos hay?
Llevamos ya más de 80 reuniones con inversores y empresas.
¿En ese escenario Canarias puede hacer valer su diferencial fiscal?
Debería, porque además cuenta con una posición geoestratégica que no está poniendo en valor. Ahora bien, su administración es muy lenta. Recibir permisos y licencias es un proceso muy complicado y eso es un escollo a la inversión.
¿Cree que la Ley del Suelo puede solucionarlo?
Si es atractiva, sí y creo que según se está planteando esta parece un avance claro.
¿Ese factor administrativo impide que Canarias se convierta en polo de atracción inversora?
No solo eso. Si vas por el mundo y pides la lista de países o regiones que tienen una fiscalidad baja, aparecen siempre Hong Kong, Singapur, Luxemburgo, Irlanda..., nunca está Canarias. Estamos como si nos diese vergüenza. Los gobiernos irlandés o luxemburgués, por ejemplo, te dicen, alto, claro y con orgullo que tienen una baja fiscalidad y por eso crean más empleo, más empresas y tienen rentas per cápita más altas.
¿Por qué ocurre eso?
Creo que existe el temor a que alguien diga que España o Canarias es un paraíso fiscal. Además de que no lo es, a mí no me importan los paraísos fiscales, pero sí me preocupan los infiernos fiscales, que por una fiscalidad confiscatoria y destructora se detraiga creación de empleo, de empresas, mejoras de la renta per cápita... Si lo que pretendo es defender mis servicios públicos, tengo que fomentar el crecimiento, los ingresos, porque no existe ningún sector público sin un potente sector privado detrás. Podemos hacer todas las cábalas que queramos o atender a cuentos chinos.
¿A qué se refiere?
Este es el único país del mundo en el que tienes a todo el mundo hablando de solucionar el problema fiscal desde meras estimaciones, porque el fraude fiscal es una estimación. O también eso de subir los impuestos a los ricos. Al final nos los suben a toda la clase media porque el total de ricos en España no llega a 5.000.
