La recaudación de la Comunidad Autónoma por los llamados recursos del REF (Régimen Económico y Fiscal) ascendió en el primer trimestre a prácticamente 382 millones de euros, la mayor cuantía de los últimos diez años. No en vano, la recaudación sigue sin tocar techo desde que el gobierno de Paulino Rivero aumentara en 2012 hasta el 7% el tipo general del IGIC, que es la principal fuente de ingresos del también llamado bloque canario de financiación. Y los últimos datos que maneja la Consejería de Hacienda, que dirige Rosa Dávila, no solo no muestran un cambio de tendencia, sino que, por el contrario, ponen de manifiesto cómo la cantidad que obtiene la Administración autonómica por el cobro de los impuestos, tarifas, arbitrios, intereses y demás conceptos vinculados al REF sigue creciendo. Tan es así, que la cifra ingresada en las arcas autonómicas hasta el 31 de marzo no solo es la más alta del último decenio, sino que también es la segunda más alta de toda la serie histórica, que abarca desde 1999.
Un hecho en el que subyace la alta capacidad de recaudación del Impuesto General Indirecto Canario, el mencionado IGIC, el mismo que el Ejecutivo de las Islas se resiste a rebajar, pese a la presión del Partido Popular (PP), y que se mantiene prácticamente en las mismas cifras que el año pasado, cuando el gabinete que preside Fernando Clavijo ingresó más que nunca por este mismo concepto.
En los tres primeros meses del año, la recaudación líquida por el conjunto de los recursos del REF, esto es, la recaudación efectiva y libre de los correspondientes descuentos, llegó, exactamente, a 381,7 millones de euros. Dos datos sirven para hacerse una idea de hasta qué punto ha conseguido exprimir el Gobierno de la región las posibilidades que le da el Régimen Económico y Fiscal: por un lado, esos cerca de 382 millones son la cuantía más alta desde el trimestre inicial de 2007; por otro, y por tanto, son 16 millones más que en el mismo período del año pasado, cuando la recaudación a finales de ejercicio batió todos los récords históricos tras sumar cerca de 1.700 millones de euros. En definitiva, todo apunta a que la Administración autonómica habrá ingresado a final de año incluso más que en 2016, cuando cobraron fuerza las voces que alertaron sobre una pretendida voracidad y afán recaudatorios del Ejecutivo.
La mayor parte de esos 381,7 millones corresponde precisamente al IGIC, que en total dejó 338,5 millones de euros. Así pues, la recaudación trimestral por el principal impuesto indirecto de la Comunidad Autónoma es prácticamente la misma que en los tres primeros meses de 2016, cuando fue solo ligeramente superior (341 millones). Una levísima reducción que, no obstante, se ha visto compensada con creces con lo ingresado de más por el Arbitrio sobre las Importaciones y Entregas de Mercancías (AIEM). Entre enero y marzo del año pasado, la cuantía recaudada por el AIEM -que grava la importación de bienes al objeto de promover la fabricación y el consumo de determinados productos locales- no llegó a 23 millones de euros, una cifra que se disparó hasta el pasado 31 de marzo hasta cerca de 39 millones -exactamente 38,8-, un incremento de un 72%.
Los datos a los que ha tenido acceso este diario descubren también variaciones en otros conceptos relacionados con el bloque del REF, aunque su peso en la recaudación total es muchísimo menor que el del IGIC o el AIEM. El Impuesto de Matriculación, por ejemplo, experimenta una subida de un 97%, de modo que lo cobrado este año casi dobla lo que la Administración autonómica percibió en el mismo período de 2016. Un notable aumento que tiene mucho que ver con la recuperación del sector automovilístico, ya consolidada tras años de crisis. Los 1,9 millones de enero-marzo de 2016 han sido este año casi 3,8 millones.
En cuanto a los intereses, los de demora por el REF ascendieron a 223.000 euros y los de demora, recargo y apremio sumaron alrededor de 255.000 euros, unos 73.000 euros menos que en el primer trimestre de 2016. Los recargos de apremio, por su parte, apenas llegaron a 7.500 euros, cuando habían sido poco menos de 25.400 euros entre enero y marzo del año pasado. En todo caso, estas cantidades apenas tienen relevancia en el global.
Clavijo ya explicó durante el último pleno del Parlamento de Canarias, precisamente al hilo de la enésima petición del PP para que se rebaje el IGIC, que su gobierno está más por la labor de una reforma fiscal "integral" que por la de hacer modificaciones puntuales. El presidente reconoció que el Archipiélago padece un "grave" problema de redistribución de renta, es decir, de incapacidad para que los beneficios de la economía lleguen al conjunto de la sociedad, un problema que un mejor y más eficiente sistema fiscal podría contribuir a paliar. Pero, en todo caso, esta reforma en profundidad lleva tiempo, y mientras tanto, Rosa Dávila viene insistiendo en que aún no toca rebajar el IGIC, un tira y afloja con el PP que cobra más relevancia ahora cuando los populares podrían convertirse en el apoyo fundamental de Coalición Canaria (CC) para acabar la legislatura, una CC que, sin embargo, es consciente de que el REF y el IGIC son la tabla de salvación de las arcas autonómicas.
