"¡Mira, María, para el crío!" Felipe Ojeda busca un buen regalo para su hijo de 14 años, que el próximo mes celebra su decimoquinto cumpleaños "y está antojado con una maquinita de esas que vuelan". Este vecino de Las Palmas de Gran Canaria llama con insistencia a su mujer Candela Jiménez, perdida entre percheros con pantalones y blusas por debajo de los 20 euros. "No podemos dejar pasar esta oportunidad porque cuestan mucho menos de lo que hemos visto hasta ahora", apunta. Y es que la tecnología se sube al carro de la ganga. Gafas de realidad virtual a diez euros, ofertas de dos drones por 80 o 60 euros en función de si llevan incorporados cámara o no, ratones a tres euros o mascotas de pupitre con forma de larvas que detectan obstáculos por tan solo un euro.

Fisaldo, la feria de gangas y oportunidades, dio este miércoles el pistoletazo de salida en Infecar con la presencia de artículos de ferretería, 1.500 metros cuadrados más destinados a la venta de vehículos de ocasión, y una sección de informática como principales novedades. Y es que si algo llamaba la atención de compradores como Ojeda era cómo las pequeñas aeronaves no tripuladas, frágiles en apariencia, alzaban el vuelo. Ahora bien, mucho más despertaba su interés el precio de estos aparatos que sin rebajas alcanzan, en función del modelo, los 119,95; 169,95; y 80 euros.

Pero no solo tecnología buscan los consumidores. Artículos de textil, muebles, almohadas, sartenes, kits de baño y hasta cabezas de buda de todos los tamaños se puede encontrar en algunos de los 70 puestos que 60 empresas ofrecen en 8.000 metros cuadrados de feria. Dos horas y media después del arranque de Fisaldo, Manuel López ya estaba cargado de bolsas repletas de juegos de cama, ropa interior, prendas de vestir, gorras o bañadores. Ya se ha hecho con una treintena de artículos por 140 euros, estima que se ha ahorrado unos 80 euros, y no piensa parar. "Esta vez está mejor que otros años en cuanto a precio y calidad", apunta. López, que ayer acudió junto con su mujer y su cuñada, se podría definir como un cazador profesional de chollos. Acude cada día de todas las ediciones -esta es la décima octava- y, en algunas ocasiones, ha llegado a gastar hasta 500 euros.

La feria de saldos abrirá hasta este domingo desde las diez de la mañana hasta las nueve de la noche. El precio de la entrada es de 1,5 euros salvo para personas con discapacidad, pensionistas, menores de 12 años y desempleados. El coste de organización del evento asciende a 70.000 euros, según indicó el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, quien vaticinó un aumento de la cifra de visitantes con respecto al ejercicio anterior, cuando unas 27.000 personas acudieron a esta cita anual con las gangas.

Yaiza Pestana, responsable de un puesto de zapatos, subraya que los compradores este año "están animados". Es la segunda vez que se presenta a este feria porque el resultado que obtiene "sí compensa". No en vano, el 75% de las empresas que participan en Fisaldo, procedentes de diferentes islas, repiten en esta feria.

Pese a que ya hay un leve repunte de la economía, buena parte de quienes buscan una ganga lo hacen empujados por "el paro, los sueldos miserables o por la necesidad de ahorrar ante la incertidumbre que existe", tal y como apunta Coca Melián con dos bolsas en sus manos. Sin embargo, Inmaculada Santana cree que para quienes aún los coletazos de la crisis golpean sus economías domésticas, la posibilidad de comprar se cierra. "Si hay crisis, ni en Fisaldo ni en ningún sitio". En su caso, va con la intención de hacerse con productos de tiendas que ya conoce porque no le importa la temporada.

La feria rifará cada día 5.700 euros en vales de 150 euros cada uno para gastar en los expositores del evento y pone a disposición de los clientes 500 plazas de aparcamiento gratuito.