El Grupo CaixaBank obtuvo en el primer semestre de 2017 un beneficio atribuido de 839 millones de euros, lo que supone un aumento del 31,6% con respecto al mismo periodo de 2016. La evolución del primer semestre viene marcada por la consolidación por integración global de los resultados de BPI (Banco Portugués de Investimento) desde febrero, que impacta en los principales epígrafes de la cuenta de resultados, y por la intensa actividad comercial de la entidad.

Esta fortaleza comercial permite una elevada capacidad de generar ingresos, con 4.280 millones de margen bruto. Su evolución interanual (5,7%) refleja tanto la incorporación de BPI como la mayor generación de ingresos básicos del negocio bancario (margen de intereses, comisiones, ingresos del negocio de seguros de vida riesgo y resultado por puesta en equivalencia de SegurCaixa Adeslas), que aumentan un 20,6% en el grupo y un 11,8% en CaixaBank, y que permiten compensar los menores resultados derivados de activos y pasivos financieros.

La rentabilidad del Grupo CaixaBank mejora desde diciembre 90 puntos básicos y se sitúa en el 6,5%, mientras que el ROTE (retorno sobre capital tangible) recurrente del negocio bancario y asegurador alcanza el 10,3%, con un resultado de 927 millones en el semestre.

CaixaBank mantiene el liderazgo en banca retail, con una cuota de penetración de clientes particulares en España como entidad principal del 25,7%, y la primera posición en nóminas, con una cuota del 26,4%, y en seguros, planes y fondos por recursos gestionados, con una cuota del 21,7%. La entidad mantiene el liderazgo en banca online, con 5,5 millones de clientes, y en banca móvil, con 3,9 millones. La tecnología y la digitalización apoyan el modelo de negocio de CaixaBank, con el 97% de la documentación firmada digitalmente.

En un contexto de tipos de interés en mínimos, el margen de intereses alcanza los 2.349 millones de euros (15,1% respecto al primer semestre de 2016), impactado por la incorporación del negocio de BPI, que aporta un 8,2% de crecimiento. En CaixaBank, el margen de intereses aumenta un 6,9%, esencialmente por la gestión de la actividad minorista, con una fuerte reducción del coste del ahorro a vencimiento, y la evolución negativa de los ingresos impactada por la reducción de la rentabilidad de la cartera crediticia y de la cartera de renta fija por la bajada de los tipos de interés de mercado.

Los ingresos por comisiones alcanzan los 1.252 millones de euros. En su evolución (23,9%) incide la aportación de BPI (11,6%) y los ingresos derivados de la actividad comercial de CaixaBank (12,4%), que en el año recoge mayores comisiones por operaciones de banca de inversión y una mayor transaccionalidad.

La evolución de los gastos de administración y amortización recurrentes (2.216 millones, 10,7%) refleja la incorporación de BPI. En perímetro homogéneo crecen un 0,8% en el semestre, pero descienden un 0,9% en el segundo trimestre. Los dos acuerdos de prejubilaciones suscritos en 2017 supondrán un ahorro anual de 104 millones en los próximos trimestres. En 2017, se han registrado 106 millones de costes de reestructuración de BPI (de los que 96 millones en el segundo trimestre).

El balance ganancias-pérdidas por activos y pasivos financieros y otros se reducen hasta los 177 millones (-70,1%), y los ingresos de la cartera de participadas caen un 2,8%, hasta los 389 millones de euros, reflejo, entre otros, de la evolución de los resultados de las participadas, el impacto atribuido de la venta del 2% de la participación de BPI en BFA (-97 millones de euros) y cambios de perímetro.

La actividad comercial destaca por el fuerte crecimiento del negocio de seguros y gestión de activos. Los activos bajo gestión se sitúan en 85.590 millones de euros, con un aumento del 4,5% en el semestre, a pesar del impacto negativo en la valoración de los activos derivado de la evolución del mercado en el segundo trimestre.

Al igual que en los últimos ejercicios, destaca el incremento del patrimonio gestionado en fondos de inversión, carteras y sicavs, hasta los 59.461 millones de euros (4,9%), así como la evolución positiva de los planes de pensiones (3,6% en 2017), hasta los 26.129 millones de euros.

El grupo mantiene también el liderazgo en seguros, planes y fondos por recursos gestionados, con una cuota del 21,7%. Los recursos totales de clientes se sitúan en los 348.903 millones, con un aumento del 14,8% en 2017 tras la incorporación de BPI (11,4%). En CaixaBank, los recursos de clientes se incrementan un 3,4% en 2017, con un aumento del 4% de los recursos en balance, si bien el crecimiento del ahorro a la vista en el segundo trimestre está impactado por efectos estacionales.

Los créditos sobre clientes brutos ascienden a 228.435 millones, un 11,5% más tras la incorporación de BPI. En CaixaBank la cartera total se mantiene estable (0,1%) y la cartera sana crece un 0,5% en 2017. Si no se considera el efecto estacional de los anticipos a pensionistas de junio ni la reducción de la financiación a CriteriaCaixa de 951 millones en el marco del proceso de la desconsolidación prudencial, la evolución de la cartera sana es del 0,2%.

La ratio de morosidad del Grupo CaixaBank se sitúa en el 6,5% (6,9% a 31 de diciembre 2016), muy por debajo de la media del sector -8,7% en mayo-, y la ratio de cobertura de la cartera dudosa mejora hasta el 50% (47% a cierre de 2016). En CaixaBank, los saldos dudosos se reducen 574 millones de euros en el segundo trimestre (-2.044 millones de euros en los últimos doce meses), reflejo de la mejora de la calidad de la cartera crediticia.

Las dotaciones para insolvencias se sitúan en 472 millones (-1,5% respecto al mismo período de 2016 y un -10,9% respecto al primer trimestre de 2017, que incluía dotaciones singulares). El apartado de otras dotaciones a provisiones asciende a 763 millones e incluye, principalmente, el registro en el semestre de 455 millones asociados a prejubilaciones (152 y 303 millones en el primer y segundo trimestre del ejercicio, respectivamente) y 154 millones de saneamiento en Sareb.

La cartera de adjudicados netos disponibles para la venta se mantiene estable, en 6.258 millones de euros, con una ratio de cobertura del 58%. En el primer semestre se ha mantenido un elevado nivel de comercialización de inmuebles, con 669 millones en ventas (+9,7% respecto al mismo periodo de 2016), con resultados positivos desde el cuarto trimestre de 2015.

El resultado sobre el valor contable neto se sitúa en un 15% en el primer semestre de 2017. Los activos inmobiliarios destinados al alquiler ascienden a 3.086 millones de euros netos de provisiones. La ratio de ocupación de esta cartera es del 90%.

El Grupo CaixaBank alcanza una ratio Common Equity Tier 1 (CET1) fully loaded del 11,5% a 30 de junio, en línea con el rango fijado en el Plan Estratégico 2015-2018 (11%-12%), y 2,8 puntos porcentuales por encima de los requerimientos del supervisor del 8,75%. Tras la integración de BPI, la evolución del semestre ha sido de 22 puntos básicos debido a la generación de resultados y -3 puntos básicos por la evolución del mercado.

El Tier 1 se ha visto beneficiado por la emisión de 1.000 millones de instrumentos de Tier 1 adicional (AT1) realizada en junio, que supone un impacto de 66 puntos básicos, hasta alcanzar el 12,2%. El capital total, en términos fully loaded, se sitúa en el 15,5% e incluye la emisión de 1.000 millones de AT1 realizada en junio y una emisión de 1.000 millones de deuda subordinada efectuada en febrero. Adicionalmente, esta ratio ya incluye la amortización de la emisión de aproximadamente 1.300 millones de deuda subordinada y, proforma, la nueva emisión de 1.000 millones de deuda subordinada suscrita el 14 de julio, por lo que la ratio de capital total pasa del 14,9% al 15,5% proforma.