La Guardia Civil reforzará su presencia en los controles de pasajeros del aeropuerto de El Prat, en Barcelona, ante la huelga indefinida convocada el pasado lunes por los trabajadores de Eulen, que mañana volverán a votar si aceptan la propuesta de aumento salarial de la Generalitat y desactivan los paros.

Así lo anunció ayer el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, en la Ciudad Condal, adonde se desplazó para presidir el comité de crisis creado para abordar este conflicto y reunirse después con varios consejeros del Gobierno catalán y con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. El ministro explicó que el comité de crisis había decidido iniciar los preparativos para que un número "significativo" de agentes de la Guardia Civil se incorporen a las "líneas de control" del aeropuerto de Barcelona y garantizar así el orden y la seguridad de esta instalación, teniendo en cuenta el estado de alerta terrorista en el que se encuentra el país, agregó. El ministro subrayó que la mayor presencia de efectivos de la Guardia Civil en el aeropuerto se plantea en especial para este lunes, cuando los trabajadores de Eulen tienen previsto iniciar una huelga indefinida, después de haber rechazado ayer una propuesta de subida salarial de 200 euros mensuales en 12 pagas.

El anuncio de De la Serna no ha sentado bien, sin embargo, en la Guardia Civil. De hecho, la Asociación Unificada de Guardias Civiles, mayoritaria en el cuerpo, respondió con un comunicado en el que avisa que la plantilla de la Benemérita se encuentra "bajo mínimos" y rechaza que tengan que ser "los agentes de base quienes terminen pagando las consecuencias del conflicto laboral" en el aeropuerto de El Prat. Además, la asociación precisa que las funciones de control en el Prat deben llevarse a cabo "por agentes especializados y con autorización de AENA".

Por otra parte, los sindicatos CC OO y USO mostraron su rechazo a la convocatoria de paros parciales de los trabajadores de seguridad de los aeropuertos de La Coruña y Santiago de Compostela y acusaron a UGT, el único sindicato que apoya la convocatoria, de anunciarla sin consenso con los trabajadores. Ambas organizaciones no descartan la huelga pero anteponen el proceso negociador.

Además, desde el sindicato CSIF se pidió ayer públicamente la "inmediata" destitución del presidente de AENA, José Manuel Vargas, por su "desastrosa" gestión al frente de la empresa semipública.