El árbitro designado por el Estado, Marcos Peña, para poner fin al conflicto laboral entre Eulen y los trabajadores de seguridad en el Aeropuerto de Barcelona-El Prat, advirtió ayer que el sistema actual de licitación "solamente tiene en consideración el precio", lo que "anima a las ofertas temerarias" en servicios esenciales. Bajo su punto de vista, "las empresas de servicios de proximidad tienen una vida bastante inhóspita" ya que están "sometidas a licitaciones que, por la cultura española, solamente tiene en consideración el precio", lo que anima a las compañías a realizar ofertas a la baja.

"Estos trabajadores prestan servicios esenciales a la comunidad y no existe una asociación entre el valor profesional y salarial del trabajador y las consecuencias que la huelga o el cese del trabajador provoca", lamentó el presidente del Consejo Económico y Social (CES).

Peña reconoce que con su resolución "no quería que se contaminara el convenio del sector" por lo que "había cosas que no se podían contemplar", como el concepto de absorción o compensación salarial, de forma que los 200 euros quedaran por encima de un eventual acuerdo convenido por convenio.