Los cerca de 20.000 trabajadores que trabajan en el sector del metal de la provincia de Las Palmas tendrán una subida salarial fija de 1,5% anual hasta el año 2021 con una revisión anual por encima de ese porcentaje en función de la evolución del IPC. Los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y Unión General de Trabajadores (UGT) y la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa del Metal y Nuevas Tecnologías de Las Palmas (Femepa) firmaron el nuevo convenio colectivo provincial del sector, que tendrá una vigencia de cuatro años (2018-2021).

Tanto los representantes de las empresas como los dirigentes sindicales valoraron la firma de este acuerdo, que garantiza la paz social en el sector durante los próximos años. Además de la revisión salarial, también se incluyen otros aspectos sociales relevantes como la extensión de uno a tres meses del derecho a cobrar el 100% del salario debido a una baja médica y una mayor garantía en la formación de los trabajadores, ya que éstos tendrán una bonificación de 50 euros mensuales si se forman para mejorar la productividad y los conocimientos dentro de la empresa.

El convenio también lleva la estabilidad laboral al sector de las reparaciones navales, empresas siderometalúrgicas y talleres hasta el año 2021, lo que está generando también la creación de empleo, que se mantendrá en los próximos ejercicios según las previsiones.

Las negociaciones entre la parte empresarial y la laboral se iniciaron desde principios de año y, según los representantes del sector, la vocación desde el principio ha sido la de alcanzar un acuerdo de varios años para garantizar la paz social y que no haya vaivenes en los próximos años debido a las negociaciones. El sector del metal de la provincia de Las Palmas cuenta con una destacada tradición en la firma de convenios que abarcan varios ejercicios.

Sin embargo, la situación no es la misma en la provincia de Santa Cruz de Tenerife ya que a última hora los sindicatos se han negado a firmar el convenio provincial ante lo que consideran una cláusula "abusiva" introducida por la patronal. El acuerdo estaba previsto que se firmara la pasada semana, pero finalmente ha quedado suspendido hasta que se termine de negociar. Según el dirigente de CCOO Francisco Pozo, los empresarios quieren que el 80% de la jornada laboral sea de carácter "variable", lo que no es asumible por los sindicatos, que se oponen a la misma al considerarlo un "disparate".