Los trabajadores del Hotel Riu Oasis y los propietarios del Centro Comercial Oasis han solicitado al Cabildo de Gran Canaria que deje sin efecto la pretensión de declarar como Bien de Interés Cutural (BIC), en la categoría de Sitio Histórico, todo el entorno de Maspalomas, en el que precisamente se ubican el establecimiento alojativo y los negocios de restauración y comercio citados.

Los presidentes del comité de empresa del hotel, Carlos Pulido, y de la comunidad de propietarios del centro comercial, Antonio Pérez, registraron ayer la misiva en la institución insular con el fin de que llegue a manos del presidente Antonio Morales, al que expresan su decepción por que la corporación mantenga el expediente del BIC que, entienden, defiende intereses particulares aun cuando "eso va en contra del sentido común e interés general que deben guiar a una administración pública".

El expediente del BIC, que inició el Cabildo insular durante el mandato de José Miguel Bravo de Laguna bloqueó el proyecto de derribo y la construcción del Hotel Oasis del grupo mallorquín, así como la renovación de estos establecimientos, que están justo delante de los jardines de este alojamiento.

Los trabajadores de Riu y los propietarios del Oasis advierten que una vez que sea firme la protección del Oasis se habrá consumado "un ataque a la continuidad y estabilidad de los puestos de trabajo", por lo que instan a Morales a que deje sin efecto la declaración del Oasis como BIC.

Asimismo, aprovechan el informe del catedrático de Arqueología, Antonio Tejera,y el de la Casa de Colón, realizado por Elena Acosta, incluidos en el expediente, para recordar que Cristóbal Colón, además de arribar a Maspalomas en su cuarto viaje a América, visitó antes Gando, el Puerto de La Luz y Las Palmas de Gran Canaria, para solicitar al Cabildo que en base a esos hechos históricos amplíe el expediente y también califique como BIC estos tres lugares.

La carta concluye alertando de la evidencia de que la finalidad de la protección del palmeral no ha tenido por objeto proteger un enclave histórico, sino alterar jurídicamente la situación urbanística de la zona de Maspalomas.