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Riu ficha al exfiscal Pedro Horrach para desatascar el lío jurídico del Oasis

La cadena mallorquina se hace con los servicios del impulsor, junto con el juez Castro, del 'caso Nóos' que sentó en el banquillo a Urdangarin y la infanta Cristina

Riu ficha al exfiscal Pedro Horrach para desatascar el lío jurídico del Oasis

Contraataque de relumbrón de la cadena hotelera Riu en la disputa administrativa y judicial que sigue para rehabilitar su hotel Oasis del Sur de Gran Canaria. El equipo jurídico de la empresa turística mallorquina que comanda la letrada Águeda Borges se ha reforzado contratando los servicios del exfiscal Anticorrupción de Baleares Pedro Horrach, conocido por llevar el peso de la acusación pública en el caso Nóos, en el que el duque de Palma, Iñaki Urdangarin, resultó condenado a seis años y tres meses de prisión.

El conocimiento de Horrach del aparato de Justicia y su mostrada capacidad para desempeñarse en causas en las que abundan las ramificaciones, los afectados y la presencia de personas de relevancia le han valido el interés de quienes han decidido hacerse con sus servicios.

El primer contacto entre Riu y el abogado se produjo con motivo del concurso para la adjudicación de la gestión del Hotel Santa Catalina, a la que los mallorquines optaron dentro de una UTE (unión temporal de empresas) que crearon junto a Manuel Padrón (Grupo Juan Padrón), actual concesionario. De hecho fue este último quien decidió contratar los servicios del exfiscal Anticorrupción balear.

Colaboraciones futuras

La aventura, saldada sin éxito -Barceló fue la empresa escogida para gobernar el recinto hotelero capitalino durante los próximos 35 años-, sirvió, sin embargo, para que Riu y Horrach exploraran la posibilidad de abordar futuras colaboraciones.

El embrollo del Hotel Oasis ha sido la oportunidad precisa. En el año 2013 la cadena hotelera Riu comunicó su intención de derribar el inmueble y construir uno nuevo. Grupo Lopesan, empresa competidora del sector alojativo, promovió la declaración del edificio como monumento, lo que cercenaba la posibilidad de echarlo abajo. El Cabildo de Gran Canaria, con José Miguel Bravo de Laguna, entonces en el Partido Popular (PP), al frente, desestimó dicha posibilidad pero inició un expediente para declarar la zona Bien de Interés Cultural (BIC) en su modalidad de sitio histórico.

El argumento expuesto por la institución insular fue el paso de Cristóbal Colón por el lugar para surtir a la expedición de uno de sus viajes a América (el de 1502) de agua y leña. Esa decisión extendió las afecciones a otros inmuebles hoteleros de la zona y centros comerciales. Sin embargo, el Gobierno de Canarias negó la declaración del BIC, en una decisión que el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) tumbó el pasado verano.

El Ejecutivo regional ha hecho pública su intención de no recurrir el fallo ante el Tribunal Supremo, pero sí lo han hecho la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo (FEHT), que siempre ha estado del lado de Riu, la propia cadena mallorquina y el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana.

Horrach decidió abrir despacho la pasada primavera. Tenido como azote del poder, su trabajo dio con el expresidente balear Jaume Matas en prisión, si bien recibió críticas cuando expresó su rechazo a que la infanta Cristina de Borbón se sentara en el banquillo de los acusados por el caso Nóos.

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