¿Qué contenido tiene esta segunda edición?
La mayoría de delegados son los mismos. Solo tres o cuatro países han cambiado de persona y por parte del personal de la Unidad de Preparación y Desarrollo de Proyecto de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) también son mayoría quienes repiten. El curso de ahora es más grande, se articula por módulos. En el primero se trataba más de analizar los fundamentos de los partenariados público-privados en infraestructuras y ahora vamos más lejos en análisis de riesgos, desarrollo de proyectos y selección de los que son más adecuados.
¿Responde de forma positiva el sector privado a las necesidades de inversión de África?
El interés es creciente, pero está claro que el sector privado se mueve por beneficios, fija su atención en sectores en los que puede obtenerlos. Se puede observar claramente en telecomunicaciones, con una amplia presencia del sector privado en África Occidental, y también en el de los puertos, donde hay mucha actividad tanto por la concesión directa de la gestión como por el dinamismo de las actividades logísticas. El objetivo que perseguimos ahora es incorporar al capital privado a sectores como la energía o el desarrollo de infraestructuras, carreteras, por ejemplo; en estos ámbitos hay un gran margen de mejora.
¿Caben empresas canarias en proyectos de tan gran tamaño?
Al final depende del tipo de proyecto. Por ejemplo, ahora mismo estamos en la fase de estudio del corredor Abiyán-Lagos, 1.028 kilómetros de autopista, y es una empresa española la que lo está desarrollando dentro de un grupo del que también forman parte otras de menor dimensión. Es decir, las empresas medianas y pequeñas, también las canarias, pueden entrar perfectamente. No las excluye el gran tamaño de los retos que perseguimos, las oportunidades existen.
¿Mantienen como objetivo esa inversión global de 90.000 millones de dólares?
Sí, es una estimación a largo plazo, hasta 2040, de las necesidades en infraestructuras en la Cedeao. La cifra evidencia que son muchas y esa cantidad no pueden asumirla los gobiernos por sí solos, de ahí nuestro trabajo para implicar a la empresa privada. Si algo hemos aprendido es que para alcanzar el éxito es necesario generar proyectos atractivos. Por ejemplo, la compañía francesa Bolloré es muy activa tanto en el sector marítimo como en el desarrollo de redes ferroviarias. Si se ponen ante las empresas proyectos que pueden dar beneficios, van a responder.
Aparte de este lógico atractivo para la inversión, ¿qué problemas les plantean las compañías privadas para participar?
Lo primero y más importante que exigen es que exista seguridad en la inversión. Eso tiene que ver con que los países tengan una buena gobernanza, cuenten con sistemas financieros sólidos y que las condiciones estén siempre claras. También nos piden que aseguremos el nivel de servicios en las infraestructuras.
¿En qué sentido?
Si voy a construir una fábrica de cemento, necesito garantías de que mi inversión va a estar respaldada por un buen servicio de energía que permita funcionar a la compañía. De hecho, a los países de la Cedeao en los que existen sistemas energéticos más estables, como Senegal o Costa de Marfil, se ha demostrado que llegan más inversiones de este tipo que a otros.
¿En qué medida puede revitalizar este plan el mercado laboral de África Occidental?
Es una de las principales ventajas. Atraer a la empresa privada significa que se crean puestos de trabajo. La cantidad de dinero invertido repercute directamente, además, en las economías de los países, lo que ayuda a crear más empleo. Y hay más. Le pongo el caso particular de mi país, Gambia, para dar cuenta de cómo elevan el nivel salarial estas actuaciones. Yo soy un empleado público dedicado al desarrollo de infraestructuras y cobro dos o tres veces menos que los técnicos contratados por estas empresas. En la medida en que haya salarios mayores, también se está incentivando el crecimiento de la economía y el empleo. Además, del know how, el conocimiento que traen consigo a cada país para el desarrollo de las infraestructuras.
¿Habrá una tercera sesión de este programa?
Por el momento, el acuerdo de Cedeao con Casa África era para estos dos primeros años. Cuando acabemos, haremos la evaluación de cómo ha ido, yo creo que muy bien, pero este proyecto que desde el primer momento financiación la Aecid y tendremos que sentarnos para ver si podemos tener continuidad. Ya le adelanto que por mi parte estoy encantado.
¿Y cómo ve el desarrollo hasta el momento el sector público del entorno de la Cedeao?
Perfecto. No puede ser de otra manera.
