El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha recordado este viernes la figura de Adolfo Suárez para reivindicar el diálogo y el consenso entre todos los partidos en los "grandes retos nacionales" y en cualquier cambio de la Constitución que se pretenda plantear.

Rajoy ha pasado su primera jornada de campaña en Ávila junto al hijo del expresidente, Adolfo Suárez Illana, y ambos han intervenido en un acto junto a la estatua que recuerda en esta ciudad al artífice de la Transición.

En su discurso, Rajoy ha recordado a Suárez como un "hombre de Estado y un patriota" y como alguien que "supo conciliar sus convicciones" con "la tolerancia y el diálogo con los demás". Y ha apelado a la necesidad de ese diálogo en asuntos cruciales para España.

"Cada uno tiene sus recetas, lo importante es que en los grandes retos nacionales haya una gran mayoría que vaya junta a la hora de fijar las normas constitucionales, de defender la unidad de España, de luchar contra el terrorismo y de apoyar a nuestros militares. Eso es lo que importa", ha dicho Rajoy.

Y por eso ha defendido la forma de hacer política que tenía Suárez y que quiere tener el PP, basada en sus principios y convicciones pero al mismo tiempo hecha "con moderación, espíritu de diálogo y tolerancia".

Ha pedido así que todo lo relativo a la Constitución, la soberanía nacional, la igualdad entre los españoles, la política de defensa o la exterior sean "producto de grandes acuerdos entre todas las grandes fuerzas políticas".

"Hay temas muy importantes que deben unir a toda la nación", aunque luego esté el "debate sano" entre las distintas opciones políticas, ha añadido.

Como ejemplo de esa necesaria unidad, ha señalado el "desafío muy grande" por parte de los independentistas en Cataluña, que "afecta a la soberanía nacional", así como la vuelta de la amenaza del terrorismo yihadista.

Ante estos asuntos, ha insistido, es "muy importante la imagen de unión que están dando la mayoría de las fuerzas políticas" y ha considerado que en esa unión hay que "perseverar en el futuro".

Asimismo, ha hecho una defensa cerrada de la Constitución española, aunque ha admitido que "se puede cambiar" y "se puede adaptar", como se ha hecho en dos ocasiones.

Ha advertido en cualquier caso de que a la hora de reformar la Carta Magna "hay que saber muy bien qué es lo que va a hacer" y "desde luego hay que hacerlo con un consenso como el que consiguió Adolfo Suárez en su momento".

Elogios de Suárez Illana

En este acto, el presidente del Gobierno ha sido presentado por Adolfo Suárez Illana, quien ha admitido tener simpatía y llevarse "muy bien" con rivales de Rajoy como Pedro Sánchez y Albert Rivera, pero ha subrayado que en este momento en el que al país le esperan grandes retos hay que afrontarlos con "extraordinaria capacidad y extraordinaria templanza".

Y para ello, ha añadido, son necesaria unas "manos expertas" como las de Mariano Rajoy.

Además, Suárez Illana ha dicho sentirse "muy orgulloso" de poder pedir el voto para sus "amigos del PP", aunque ha recordado que el cabeza de lista por el PSOE, Pedro Muñoz, es un "buen amigo" y también comprende que se le vote.

Y así, tras señalar que respeta todas las opciones y admitir que Rajoy ha tenido, como tuvo su padre, "aciertos y errores", Suárez Illana ha señalado que el presidente del Gobierno ha logrado dar al país una "esperanza distinta" a la de hace cuatro años y ha hecho con su gestión un "esfuerzo ímprobo", por lo que es "digno de merecer" de nuevo la confianza de los ciudadanos.

Tras este acto, el presidente del Gobierno, Suárez Illana y los numerosos dirigentes del PP que les acompañaban, entre ellos el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, y el vicesecretario de Comunicación y cabeza de lista por Ávila, Pablo Casado, han dado un paseo por el centro de la ciudad.

Ha sido un paseo multitudinario que ha acabado con la visita privada de Rajoy y Suárez Illana a la tumba de Adolfo Suárez en el claustro de la catedral de Ávila.

Rajoy y Suárez Illana se han parado en numerosas ocasiones a saludar, se han hecho fotos y han hablado con vecinos y simpatizantes.

También han visitado un famoso obrador en el que se elaboran artesanalmente las yemas de Santa Teresa. Pablo Casado le ha comprado unas cuantas al presidente. Después han caminado hasta el Mercado Chico de la ciudad, donde han visitado algunos puestos.

Tras los últimos saludos, Rajoy y Suárez Illana han hecho una visita privada a la tumba de Adolfo Suárez, por expreso deseo del hijo del expresidente, según fuentes populares.