El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha asegurado que lo "que urge" es que el nuevo Parlamento responda a una situación de "emergencia social" y que esa es su prioridad a negociar con otros partidos sin renunciar a la defensa de la unidad de España desde la "democracia", en alusión al referéndum catalán.

Tras reunirse con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Palacio de la Moncloa, Iglesias ha señalado que el jefe del Ejecutivo "es perfectamente consciente de que Podemos "ni por activa ni por pasiva va a facilitar un Gobierno presidido por él" ni por nadie del PP y ha alertado de la posibilidad de que el PSOE esté pensando en una "gran coalición".

El líder de Podemos, que ha trasladado a Rajoy que ahora "no toca hablar de sillones, sino de España", ha sido preguntado insistentemente sobre la posibilidad de que Podemos pueda aparcar su defensa del referéndum catalán en aras de un acuerdo con el PSOE y, aunque no ha pronunciado la palabra referéndum, ha asegurado que su posición es muy clara.

"Lo que hemos dicho es lo mismo que decimos siempre: quien no entienda que la unidad de España se defiende desde la democracia y quien no entienda la diversidad y la plurinacionalidad del país no ha entendido nada. Lo mismo que dijimos hace una semana lo seguimos diciendo", ha subrayado.

Una respuesta que ha repetido ante las sucesivas preguntas sobre si el referéndum es irrenunciable para Podemos.

"Ahora bien, lo urgente", ha recalcado tras defender la plurinacionalidad de España, es que "las Cortes comienzan su andadura el día 13 y los españoles no pueden esperar y no merecen unos representantes hablando de juegos de sillas y no de los problemas de los ciudadanos".

Iglesias ha señalado que el referéndum es "un tema tabú" para Pedro Sánchez, con quien habló la semana pasada, y ha calificado de "inaceptable" que el PSOE utilice una "retórica de cambio" en la campaña y después permita que sus exministros sigan formando parte de consejos de administración de grandes empresas y que sus diputados cobren planes de pensiones privados.

Frente a ello, Iglesias ha fijado su prioridad en que el futuro Parlamento apruebe cuanto antes la "Ley 25" que pretende presentar Podemos el día de constitución de las Cortes para que ningún español sufra cortes de luz y calefacción, acabar con los desahucios sin alternativa habitacional, ofrecer esa posibilidad a las víctimas de violencia machista y poner fin al copago farmacéutico para los pensionistas.

Iglesias ha lamentado que otras formaciones políticas con las que se ha puesto en contacto, especialmente el PSOE, no le hayan dado aún una respuesta sobre esa proposición de ley que, ha insistido, es la oportunidad para "que todo el mundo se retrate".

Después de acusar a los socialistas de estar más preocupados de sus luchas internas que de los problemas de los ciudadanos, ha emplazado al PSOE a dejar de hacer "teatro" y aclarar si finalmente va a facilitar un gobierno del PP con su abstención.

Quienes están ocupados en hablar de "sillones, congresos internos, luchas intestinas y cuchillos" demuestran, a su juicio, que "forman parte de un bloque prorestauración e inmovilista y que no están a la altura que pide España".

En esa misma línea, ha considerado que en la primera oportunidad que han tenido los socialistas se han alineado con el PP y con Ciudadanos al valorar el mensaje de Navidad del Rey Felipe VI, en el que -ha añadido- el jefe del Estado no aludió ni a la corrupción ni la desigualdad.

En esa posición del PSOE Iglesias vio "visualizado" un acuerdo PP-PSOE-Ciudadanos que podría proyectarse en una "gran coalición" de Gobierno.

Iglesias ha expuesto también a Rajoy su valoración del resultado de las elecciones en esta entrevista que ha dicho que forma parte de los contactos que él ha abierto con otros partidos, incluidos PSOE, Unidad Popular y ERC, para afrontar el escenario político, mientras otros "prefieren hablar de quien tiene que presidir el Congreso".

No ha coincidido en "nada" con Rajoy, aunque durante dos horas han hablado en tono "cortés" y "relajado" de política, de la transición, de la historia electoral de España y hasta de la situación internacional.

"Hemos hablado de lo que creo que toca hablar en encrucijada histórica", ha enfatizado para concluir después: "Un líder político no es alguien que juega a las damas, que hace números y calcula puestos y sillones", sino alguien dispuesto y con capacidad de afrontar los "desafíos enormemente serios que estamos viviendo".