R&P Abogados fue el primer bufete de Canarias especializado en derecho bancario y financiero y su equipo, formado por letrados con dilatada experiencia, dispensa a sus clientes una información transparente y un trato personal.

Entre los éxitos de RP Abogados destacan los múltiples casos ganados por deficiente comercialización de participaciones preferentes, obligaciones subordinadas, OPV-Bankia, cláusulas suelo o hipoteca multidivisa, pero también de Valores Santander.

R&P Abogados nos relata cómo en octubre de 2007 el banco comercializó 'Valores Santander" como una oportunidad única, muy rentable y totalmente segura. Sin embargo, escondieron un detalle fundamental: el 4 de octubre de 2012 los ahorros de los clientes se convertirían en acciones del banco a 12.96 euros/acción, precio del que no se informó a los consumidores antes de suscribir el producto, lo que evidencia que "firmaron a ciegas", mientras que el banco sí podía prever la evolución futura de su propia cotización.

Como en el momento de la conversión las acciones de Banco Santander no valían 12,96€ sino 5.90€, los afectados perdieron automáticamente el 55% de sus ahorros, porcentaje que actualmente alcanza el 70% si han conservado las acciones. Los Tribunales de Canarias han dictaminado reiteradamente que el banco no informó correctamente a los usuarios de las características, complejidad y riesgos de Valores Santander, y de hecho el banco ha sido sancionado por la C.N.M.V. por mala práctica en su comercialización.

Desde R&P Abogados destacan cómo los consumidores tienen elevadísimas posibilidades de recuperar sus ahorros siempre que interponen la demanda antes del 4 de Octubre de 2016. En efecto, el plazo de 4 años para reclamar la nulidad del contrato por error en el consentimiento se computa desde la conversión realizada el 4 de octubre de 2.012 y no se interrumpe por reclamaciones extrajudiciales.

Nos relata su socio fundador cómo siguen encontrándose con personas mayores que desconocían ser titulares de Valores Santander, y que en estos casos fue trascendental la diligencia empleada por los familiares: "ante la menor sospecha hay que solicitar información en la oficina bancaria, eso sí, a la mayor brevedad".