Arranca ya la chicha del festival de cine capitalino, el pase de las películas que conforman la sección oficial a concurso. Hoy dos títulos bien distintos. La francesa Nanneri, la soeur de Mozart, dirigida por René Feret y protagonizada por Marie Feret, cuenta la historia de una hermana mayor de Mozart a la que llamaban Nanneri, también niña prodigio, que se presentaba con su hermano en todas las cortes europeas. Al final de un periplo familiar de tres años, ella conoció en Versalles al hijo de Luis XV, quien la animó a componer. La película sigue la vida de la familia Mozart de bolo en bolo, de una corte real a otra, con las audiencias fascinadas ante las extraordinarias dotes musicales de Wolfgang Amadeus.

El filme griego Attenberg, de Athina Rachel Tsangari, se centra en los problemas de la joven Marina, que vive en una pequeña ciudad industrial de la costa y guarda una relación muy cercana con su padre, un arquitecto enfermo de cáncer. Marina considera repulsivo el género humano, así que prefiere guardar las distancias y observar el mundo a través de las canciones de Suicide, los documentales de Richard Attenborough y la educación sexual que recibe de su amiga Bella. Mientras se prepara para la muerte de su padre, descubre la sexualidad con un ingeniero.

Dentro de la sección oficial, pero fuera de concurso, se proyecta hoy también la coproducción italoestadounidense A woman, dirigida por Giada Colagrande.

Esta cinta narra las vicisitudes de una joven que se enamora de un famoso escritor, pero los recuerdos de la antigua esposa comienzan a perseguirla. En este proceso obsesivo, el sujeto de la última novela del escritor se convierte en el objeto de deseo de ella.

La película está protagonizada por Willem Dafoe, que sella su segunda colaboración con la directora, que es también su pareja. Además, la música corre a cargo de un ilustre en esas lides, Angelo Badalamenti, especialmente recordado por sus colaboraciones con el director David Lynch.