Una comisión judicial del Juzgado de Instrucción número 4 de Puerto del Rosario, entre la que se encontraba el fiscal, registró las dependencias de la Policía Local de Pájara, ubicadas en Morro Jable, en busca de diferente documentación relacionados con denuncias de tráfico y otros expedientes.

Durante cuatro horas la representación judicial se encargó de rebuscar en los archivos del despacho del inspector jefe y de la secretaria administrativa procediendo a la incautación de numerosa documentación que está siendo analizada por la jueza titular y por el fiscal para determinar si existe algún tipo de irregularidades en la tramitación de las denuncias de tráfico y en otras actuaciones policiales en el municipio.

Fuentes cercanas a la investigación señalaron a este periódico que la intervención judicial tiene su origen en una denuncia de uno de los oficiales contra el inspector jefe, Esteban Hernández, respecto a denuncias de tráfico que supuestamente no se tramitaban ni ante el Ayuntamiento de Pájara ni ante la Jefatura Provincial de Tráfico.

La intervención judicial, con la presencia de la secretaria del mencionado Juzgado en las dependencias policiales estuvo perfectamente planificada ya que sabían lo que buscaban. Todos las actuaciones se dirigieron hacia los expedientes de denuncias. Por espacio de varias horas todo los trabajos de inspección se derivaron hacia las estanterías donde se archivan los citados expedientes y en el interior del despacho del inspector jefe, Esteban Hernández.

La jueza titular del Juzgado número 4 de la capital majorera observó en la documentación aportada en la denuncia del oficial de la Policía Urbana de Pájara indicios de un presunto delito, por lo que decidió intervenir, primero en las propias dependencias del Consistorio sureño recabando información y documentación que fue requisada posteriormente en las propias dependencias policiales de Morro Jable.

El concejal de Policía del Ayuntamiento sureño, Pedro Armas, señaló ayer a este periódico que "no tenemos constancia de ninguna intervención judicial". Además, Armas agregó, que " no hemos recibido ninguna notificación de ningún juzgado respecto a actuaciones irregulares de la Policía Local. No sabemos nada".

Varios agentes del citado cuerpo policial, que evitaron identificarse por miedo a represalias, argumentaron que se trata de rencillas personales entre el inspector jefe y el oficial.

"Parece que es un acto de venganza, ya que las relaciones entre ambos no son buenas. Es una guerra interna entre dos grupos que se han establecido en el interior de la policía". También añadieron que " hay que defender la presunción de inocencia y dejar que la Justicia haga su trabajo".

No es la primera vez que existen enfrentamientos internos en el seno de la Policía Local de Pájara. Ya en la anterior legislatura el entonces concejal responsable del área, Antonio Jiménez, no pudo afrontar con éxito el control del aparato policial y se multiplicaron los problemas hasta el punto que los agentes llegaron en varias ocasiones a manifestarse en defensa de sus reivindicaciones laborales. Ahora se suceden otros tipos de problemas, pero en esta ocasión con el añadido de que está actuando la Justicia.