El mar de fondo y el reboso provocaron ayer la arribada de una plaga de aguavivas a varias playas de los municipios de La Oliva y Puerto del Rosario, cuyos ayuntamientos se vieron obligados a cerrar al baño las mismas por el peligro que suponía la presencia de cientos de medusas para los bañistas.

Las zonas más afectada se localizaron en el municipio norteño, donde el Consistorio de La Oliva cerró cuatro playas en la franja de litoral que envuelve a Corralejo. Desde el muelle Chico hasta la zona de Las Agujas fueron instalados carteles de prohibición al baño para alertar a los bañistas, principalmente turistas, de la situación de peligro que suponía adentrarse en el mar.

La playa del Muelle Chico era un espectáculo con cientos de aguavivas esparcidas sobre la arena ante la sorpresa de los turistas y residentes.

La concejalía de Playas y Protección Civil de La Oliva también izo la bandera amarilla en las Grandes Playas ante la presencia de aguavivas, aunque en menor intensidad que en otras plazas de su costa.

El Ayuntamiento capitalino también cerró la principal zona de baño, Playa Blanca, ante la presencia de medusas y recomendó a los usuarios que no se bañaran ni tocaran a estos organismos marinos.

El concejal de Vigilancia de Playas de La Oliva, Genaro Saavedra, señaló: "Hoy empezaremos la limpieza de las aguavivas, aunque muchas se las llevará la marea".