La Guardia Civil detuvo ayer al presunto autor de la muerte del camarero de Morro Jable. Nueve días después que Daniel Moreno Ibáñez (Talavera de la Reina, 1989) fuera apuñalado hasta en siete ocasiones lo que le provocó la muerte casi instantánea, los investigadores han logrado dar con el paradero del presunto asesino. Tras laboriosas pesquisas y muchas horas de intensos interrogatorios, el posible criminal fue identificado como Pedro M. M, de unos 27 años, natural de Gran Canaria y vecino del barrio de Tequital, en el municipio de Tuineje. Los agentes procedieron al registro del domicilio del detenido en busca de pruebas, especialmente, el arma homicida.
Una vez que los miembros de la Policía Judicial descartaron el robo como móvil del homicidio de Dani Moreno, las pesquisas policiales se centraron en el entorno de la víctima, y especialmente en su pareja sentimental Jennifer R. I. con la que llevaba conviviendo desde septiembre de 2005. Más de medio centenar de personas han desfilado durante los últimos días por el cuartel de la Guardia Civil de Morro Jable para ser interrogados.
Daniel Moreno falleció en la noche del pasado día 3 cuando salía de trabajar como camarero de restaurantes del hotel Magic Life. En la zona de acceso del personal lo estaba esperando su asesino. Las cámaras de seguridad del hotel detectan, aunque las imágenes no son de calidad, un pequeño forcejeo antes de la agresión con arma blanca. La acción fue rápida y los navajazos certeros que afectaron a órganos vitales que le provocaron la muerte casi instantánea.
Si bien inicialmente, dos testigos aportan los rasgos morfológicos del asesino y se vincula a un conocido delincuente habitual, los agentes de la Policía Judicial cierran esta vía de investigación, y se centran en el entorno familiar, compañeros de trabajo y amigos del fallecido.
La Policía Judicial intensificó sus labores de investigación en jornadas maratonianas en busca de pistas que le condujeran hasta el asesino. No solo solicitaron a los hoteles aledaños a la escena del crimen información sobre los trabajadores que no habían acudido a su puesto de trabajo al día siguiente del asesinato, sino que extendieron sus pesquisas hasta el pueblo de Tesejerague, lugar de residencia de los padres de la víctima y donde Daniel y su pareja estaban estrechamente vinculados.
"Descartamos el móvil del robo, un ajuste de cuentas o temas de drogas, y centramos nuestra investigación en un crimen pasional por la impulsividad, ensañamiento y una falta de control en sus emociones del autor de la agresión", señalaron fuentes próximas a la investigación.
Los prolongados e intensos interrogatorios a la novia del fallecido se extendieron a su vida más intima. Los investigadores descubrieron la existencia de una tercera persona en el entorno de la pareja y a partir de ahí centraron sus pesquisas que concluyeron con la detención de Pedro M.M. como supuesto autor del crimen. Las llamadas telefónicas minutos antes del asesinato también han resultado determinantes.
Varios vehículos policiales se trasladaron ayer hasta el pueblo de Tequital donde los agentes realizaron un registro en el domicilio del detenido y en los entornos del mismo con el objetivo de buscar pruebas y el arma asesina.
