El Cabildo de Fuerteventura estudia en un cambio de modelo en la gestión del Consorcio de Abastecimiento de Aguas de Fuerteventura (CAAF), empresa consorciada por la institución insular y los seis ayuntamientos majoreros. El presidente del Cabildo majorero, Marcial Morales, entregó ayer al consejero regional de Agricultura, Narvay Quintero, un estudio del CAAF en el que se piden 23 millones para introducir sistemas de mejora de eficiencia energética, mantener el precio del agua de abasto humano a 1,20 euros y a 0,60 la destinada a riego agrícola, así como la ejecución de diversas infraestructuras para mejorar la red de distribución y acciones que permitan reducir las fugas en la red.

Morales, reconoció, que " el 42% de las perdidas de agua se producen en los contadores. Por ello, queremos invertir unos 5.5 millones de euros en cambias unos 50.000 contadores y reducir las fugas al 15%". Además, añadió, que "queremos incorporar los últimos avances tecnológicos en el CAAF que nos permita la lectura de los contadores a través de medios telemáticos sin necesidad de que los operarios se tengan que desplazar a los domicilios de los abonados".

Quintero mantuvo durante su primera visita a la isla varios encuentros con todos los sectores. En lo que se refiere al área de aguas, Narvay se ha marcado como objetivo conseguir que Fuerteventura cuente con un marco de gestión integral del agua y que se establezca un sistema de regadío para mantener la producción del sector primario. Los ganaderos plantearon la necesidad de un reparto más justo de las ayudas del Posei y la competencia desleal que reciben por el REA. Otro de los asuntos fueron la legalización de granjas y las limitaciones por la lapa majorera.