El consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, Jesús Morera, reconoció, ayer durante su visita al Hospital General Virgen de la Peña que Fuerteventura es la isla del Archipiélago que peor ha estado en materia de infraestructuras sanitarias. Ante este reconocimiento, señaló que " hay quedarle más cariño en infraestructuras del que se le ha dado hasta hora. Este es mi compromiso".

Morera, junto al presidente del Cabildo de Fuerteventura, Marcial Morales, y el equipo directivo del hospital y de la Consejería, visitó la nueva unidad de hospitalización médico-quirúrgica del centro sanitario, que entrará en funcionamiento en un plazo de diez a quince días. Esta nueva unidad, situada sobre la nueva Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), contará con 32 camas distribuidas en 14 habitaciones dobles y cuatro individuales, de las que dos se destinarán a situaciones de aislamiento.

Jesús Morera ha reiterado que la finalización de estas actuaciones son "una prioridad para el Gobierno de Canarias. En los próximos presupuestos autonómicos se consignarán alrededor de ocho millones de euros para equipamiento y obras de este hospital, que se estima podrán estar culminadas en el primer trimestre de 2017".

Las obras de ampliación del Hospital majorero incluyen la finalización de las zonas inacabadas, la creación de dos edificios para situar un conjunto de áreas como hospitalización, hospital de día, servicios de apoyo del bloque obstétrico, investigación, docencia y mantenimiento, así como trabajos de acondicionamiento en el entorno hospitalario.

Al finalizar todas estas obras, el centro sanitario insular contará con un total de 213 camas y el importe final de la segunda fase de las obras alcanza los 43,07 millones de euros.

Morera también anunció que su departamento busca reumatólogos y neumólogos dispuestos a cubrir estos puestos en la Isla para evitar desplazamientos de pacientes a otras islas. Respecto a la ambulancia medicalizada para la zona Sur, adelantó, que se pretende ubicar en un Centro de Salud.