La fuerte tromba de lluvia que cayó anoche en Fuerteventura ha provocado el cierre de dos carreteras. El agua ha cubierto con arena de las dunas parte de la superficie de la calzada que une la capital con Morro Jable y la FV-1, que va desde Puerto del Rosario a Corralejo por la costa. La formación en esta última vía de un socavón anoche produjo que dos guaguas turísticas se quedaran atrapadas. Por suerte en el incidente no hubo que lamentar daños personales. Ambas carreteras se encuentran cerradas al tráfico hasta nuevo aviso.

Por lo demás, amplias zonas de la islas Canarias han registrado una mañana soleada pese a estar en alerta por lluvias y en aviso meteorológico naranja, y con los niños en sus casas sin colegio, pero puede ser "una situación engañosa" porque para la tarde se esperan nuevamente chubascos fuertes.

Jesús Agüera, director territorial en Canarias de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), ha precisado que la intensidad de las lluvias para esta tarde puede ser similar a la de ayer, cuando se registraron medidas de entre 40 y 100 litros, según las zonas.

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Aunque es imposible precisar en qué punto concreto va a llover, "puede haber chubascos intensos en cualquier punto de las islas", ha explicado Agüera a Efe.

El sol "es una situación engañosa", en Gran Canaria ya se ha nublado y en Lanzarote y Fuerteventura está lloviendo, ha indicado.

La inestabilidad va a durar hasta el lunes, aunque para el sábado y el domingo la AEMET sitúa el aviso meteorológico en amarillo, frente al naranja de hoy.

En estas condiciones, la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias mantiene la situación de alerta y ha decretado la suspensión de la actividad en los centros educativos, incluidas las universidades.

En la jornada del jueves, los registros más elevados se dieron en la cornisa norte de La Palma, donde se recogieron 100 litros, mientras que hubo 74 en Güímar, 73 en Izaña, 66 en Gando, 63 en Los Rodeos, 46 en Santa Cruz de Tenerife y 40 en Las Palmas de Gran Canaria.

En la capital grancanaria, donde la lluvia cayó con intensidad en torno a las nueve de la mañana, no estaba prevista tanta lluvia, y en cuanto se observó se subió el aviso de amarillo a naranja, explicó el director territorial de la AEMET.

"Eso pasa continuamente, por un lado están las predicciones pero también se acomodan los avisos a la realidad y a los valores observados, esto no es una ciencia exacta, el tiempo meteorológico no es totalmente predecible", explicó.

Ahora mismo, añadió, podemos decir que hay posibilidad de chubascos intensos, pero no sé puede decir en qué punto concreto va a ocurrir, añadió.

En Gran Canaria, que ayer fue la isla más afectada, el Cabildo mantiene la situación de máxima alerta meteorológica, aunque la isla haya pasado la mañana en calma, porque el frente se mantiene bloqueado a pocos metros de la costa este y cabe la posibilidad de lluvias a lo largo del día.

La situación en la red insular de carreteras sigue sin novedades destacadas y solo se ha recibido una llamada para valorar un talud en la GC-100.

Continúan cerradas las carreteras de Cenobio y La Aldea, como ya se anunció por el volumen de desprendimientos que han sufrido.

En Fuerteventura, por la noche fue cerrada la carretera FV-1 a la altura de las dunas de Corralejo por los destrozos de la lluvia, tras producirse la rotura en de un embalse de agua, que produjo un desprendimiento y el arrastre de arena hasta la vía.

En Tenerife la carretera TF-445 de acceso a Punta de Teno es la única que está cerrada al tráfico de vehículos, por precaución.