Domingo Martínez Berriel y el ciudadano británico Redvers Brown fueron los denunciantes que han provocado la caída de Domingo González Arroyo de la alcaldía de La Oliva. Su denuncia, en representación del colectivo Agonane, ante el Seprona de la Guardia Civil en el año 2000 y ante la Fiscalía un año después, así como ante otras instituciones con competencias medioambientales, respecto a la ilegalidad de la cantera de extracción de áridos de Lomo del Pájaro, vinculada al exalcalde, ha tardado 15 años en resolverse.
Domingo Martínez, mostró ayer su satisfacción por la resolución judicial y por la inhabilitación de González Arroyo que le ha supuesto quedar apartado de la alcaldía. "El municipio de La Oliva ha sido siempre una finca privada para él". Además, añade, que el poder político y económico de Arroyo ha sido apoyado por los grupos políticos de CC y PSOE que no han dudado en gobernar con él en el Cabildo de Fuerteventura y en el Ayuntamiento de la Oliva. Ellos, también son responsables de las tropelías que ha cometido este señor durante tantos años".
Martínez critica que tanto el Cabildo majorero y el Gobierno de Canarias "han mirado para otro lado sabiendo que la cantera era ilegal, que el suelo donde se ubicaba la industria estaba calificado como suelo rústico de protección agropecuaria y que no disponía de las autorizaciones necesarias para la explotación".
En opinión de este ecologista" nos hicieron la vida imposible cuando denunciamos. Trataron de desprestigiarnos e incluso recibimos amenazas, pero estábamos cumpliendo con nuestra obligación de denunciar una ilegalidad manifiesta que ahora nos ha dado la razón la Justicia".
Domingo tiene un recuerdo especial para el grupo de ecologistas que iniciaron la lucha contra Arroyo, "Monset Martín, Dulce María Morales, Sofía Menéndez, Stephano, Susi, Ángel Dominichi, Lali Farray y Redvers Brown".
