La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Angelito Mederos, agente para todo

La capital pierde en noviembre a uno de sus policías más populares tras 42 años vistiendo el uniforme

El agente Miguel Ángel Mederos, a la izquierda, dialoga con el jefe de la Policía capitalina, Pedro Gordillo. FUSELLI

Conductor de ambulancias, cartero, monaguillo, bombero, aspirante a sacerdote, notificador judicial y agente de la policía municipal. Miguel Ángel Mederos Hernández, (La Antigua, 1952) cuelga el próximo mes de noviembre el uniforme de agente de la guardia urbana de Puerto del Rosario que ha venido luciendo desde hace 42 años. El alcalde de Puerto del Rosario, Nicolás Gutiérrez, le impuso ayer las medallas de honor por sus años de servicio público.

Ángel Mederos, conocido cariñosamente como Angelito, nació en el seno de una familia humilde en una finca de Los Pinares, en el municipio de Antigua, donde su padres José y Asunción trabajaban de medianeros. A los ocho años, tras el fallecimiento de su padre "fui recogido por mi abuela María Jesús y me envió a estudiar a los Padres Salesianos en Las Palmas, pero no me gustó aquel ambiente de curas por lo que decidió no continuar".

En 1972 regresa a la isla y dos años más tarde ingresa en el cuerpo de la Policía Local de Puerto del Rosario. "Sólo habían tres guardias. Pepe Cabrera, José Ruiz y Pepe Morales. Entonces entramos Antonio Bello y yo, aunque yo me incorporé tres horas antes porque me tocó el turno de mañana", asegura orgulloso Angelito. Además, recuerda que con la época de La Legión "habían más conflictos. Recuerdo cuando salieron a la calle un grupo de legionarios agrediendo a los vecinos con palos, piedras y patadas que se encontraban a su paso. Fue un jaleo tremendo. La gente se refugió primero en La Peña de La Amistad y después en el Cabildo".

El agente 303, número de Mederos en el cuerpo policial, recuerda que cuando entró en la Policía "solo teníamos una moto que usaba el entonces jefe Pepito Cabrera. Las patrullas las hacíamos a pie y a veces utilizamos un Seat 850 que tenía para poder desplazarnos hasta los pueblos para prestar servicio en las fiestas".

Hasta once alcaldes tuvo Angelito Mederos en el Ayuntamiento. "Con todos me llevé bien e incluso con los que viven mantenemos un trato cordial. Conmigo siempre se portaron muy bien, no tengo ninguna queja".

Uno de los servicios que no ha logrado olvidar sucedió en 1993 donde fue asesinada una joven a manos de su pareja. El policía estaba de servicio y solicitaron su colaboración. Al llegar al domicilio del conflicto se encontró con un hombre con un cuchillo en sus manos. Ángel aprovechó un descuido y se lanzó sobre el agresor logrando reducirle, aunque su cuerpo recibió dos puñaladas. "No dude ni un instante a pesar del peligro cuando vi a la mujer agonizando. Me dio dos puñaladas, una en una mano y otra en el píe, pero logré reducirlo y ponerle los grilletes. Lo más triste es que la mujer murió".

Ángel tiene un currículum intachable y con muchos reconocimientos por su labor altruista, mientas se deshace en elogios hacia su jefe, Pedro Gordillo.

Compartir el artículo

stats