El proyecto para salvar el guirre en Fuerteventura cuenta con un nuevo hito después de que el pasado miércoles naciera el primer pollo en cautividad de una pareja de ejemplares irrecuperables que se encuentran acogidos en la Estación Biológica de La Oliva, desde hace siete años.

Esta pareja de guirres realizó dos puestas, una el 24 de marzo y otra el 2 de mayo. Mientras la primera se malogró en la fase inicial del desarrollo embrionario, la segunda ha culminado con éxito después de 45 días de incubación artificial y bajo condiciones controladas de temperatura y humedad.

El embrión tuvo que ser asistido por un veterinario especializado para facilitar su eclosión, ya que transcurridas 24 horas desde que el embrión picó la cámara de aire se pudo comprobar que el pollo, que pesó al nacer solo 62,1 gramos, no era capaz de romper el cascarón.El delicado estado que presentaba el pollo en el momento de nacer hizo dudar de su supervivencia, pero que en una semana de vida ha aumentando tanto su peso como tamaño, dado que pesa un 25 por ciento más, se encuentra más activo y se alimenta sin dificultad.

Como quiera que la cría en cautividad de esta especie es muy compleja y que el pequeño guirre está en una fase muy temprana de vida no exenta de complicaciones, el Cabildo majorero reconoce que todavía es temprano para afirmar que culminará con éxito su desarrollo. Además, fuentes cabildicias, añaden, que si finalmente llegara a sobrevivir el joven ejemplar de guirre podría ser liberado antes de que finalice el año.

El primer pollo de guirre que nació en cautividad en el Archipiélago canario fue 'Tamarán', que vio la luz en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre (CRFS) del Cabildo de Gran Canaria, el 19 de junio de 2013. El proyecto de recuperación se desarrolló bajo la dirección del prestigioso veterinario Pascual Calabuig y el asesoramiento del experto en aves carroñeras Álex Llopis. En septiembre de ese mismo año, el joven guirre fue devuelto a Fuerteventura.