La tortuga que apareció en septiembre de 2014 con un enmallamiento grave en la aleta delantera izquierda que le causó un principio de necrosis, fractura humeral y una severa inflamación regresó ayer al mar en Playa Blanca, rodeada de numerosos bañistas. La veterinaria logró salvar su aleta y se evitó amputarla pero su forma y movimiento era diferente al habitual. El ejemplar fue ingresado en el Centro de Conservación y Recuperación de Tortugas Marinas de Morro Jable con cuatro kilos de peso y regresa al mar con 15 kilos. Una vez recuperada, técnicos de la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo y alumnos que realizan las prácticas de formación de verano procedieron a su liberación en la playa capitalina. En lo que queda de mes otros dos ejemplares de tortuga regresarán al medio marino en la costa de Gran Tarajal y Morro Jable. Informa: María Asensio