La temporada de cruceros arrancó el pasado domingo con fuertes críticas al comportamiento de los pequeños y medianos empresarios que no abrieron sus negocios a pesar que en la capital habían arribado más de 3.000 turistas. Las advertencias del Ayuntamiento de Puerto del Rosario, el Patronato de Turismo y las asociaciones de empresarios cayeron en saco roto. La mayor parte de los establecimientos e incluso único museos y tienda de artesanía, que gestiona el Cabildo no abrieron sus puertas. Decepción total.
La jornada inaugural de cruceros de la temporada 2016-2017 estuvo representada por los buques Mein Schiff 4 con unos 2.000 pasajeros y un millar de tripulantes, y la embarcación Artamia, con 1.100 pasajeros y 537 miembros de la tripulación. Con motivo de estos ataques la Concejalía de Turismo programó una serie de actividades en una parte de la calle peatonal Primero de Mayo, entre ellas, la actuación de la Agrupación Folclórica 'La Pioná' y la del timplista David de León, que tuvo una buena aceptación entre los visitantes.
Sin embargo, las criticas se amontonan. Desde los empresarios de las zonas comerciales de León y Castillo, Virgen de la Peña y El Charco porque todas las acciones para los turistas se localizan siempre en la calle Primero de Mayo, hasta la Asociación de Empresarios Turísticos de Fuerteventura (Asofuer) que considera necesario dinamizar Puerto del Rosario durante la temporada de cruceros.
El presidente de Asofuer, Antonio Vicente Hormiga, considera que los cruceros deberían atracar en Gran Tarajal "porque la experiencia que hemos tenido con este pueblo ha sido magnifica durante el ensayo de los atraques de los cruceros. La gente se volcó con los turistas y la Asociación La Gavia hizo maravillas para atenderlos". Además, apuntó, que "nos sentimos decepcionados por lo que viene ocurriendo en Puerto del Rosario, una ciudad abandona y muerta, especialmente los domingo cuando llegan los cruceros. Ahora entiendo como lo definen como 'muerto del Rosario'".
Hormiga critica la poca colaboración de los pequeños empresarios capitalinos "no abren sus negocios cuando saben que unos miles de turistas andan en la ciudad. De nada valen los esfuerzos de mucha gente si luego nos dan la espalda". Además, añadió, que "con esta actitud no podemos potenciar el turismo de cruceros. Por eso, somos el peor destino valorado. Esta calificación la hemos ganado a pulso. El domingo recorrí la capital y no solo sentí vergüenza sino una enorme decepción. No hay derecho que tiren por tierra tanto esfuerzo en promocionar la isla".
Por su parte, la concejala de Turismo de Puerto del Rosario, paloma Hernández, opina de forma diferente. "La jornada del domingo con los dos cruceros fue muy interesante, con muchos comercios de Primero de Mayo abiertos. Los comerciantes de la zona que decidieron abrir se mostraron satisfechos con la experiencia y se comprometieron a repetirla otros domingos que coincida con la llegada de cruceros".
Durante la nueva temporada de cruceros un total de 75 embarcaciones atracarán en el muelle capitalino, seis más que en la temporada anterior. Las previsiones que manejan las autoridades turísticas es que más de 100.000 cruceristas visiten la isla majorera.
