El Festival Womad arrancó anoche en la playa de Gran Tarajal, municipio de Tunieje, donde la música, que debía ser la verdadera protagonista, se quedó relegada a un segundo plano para dar paso a la lluvia, que en algunos momentos fue intensa, y obligó a retrasar algunos de los conciertos. El evento musical, un encuentro de diferentes culturas del planeta que no llevó mucha gente en su primera jornada Hoy se espera una mayor afluencia, siempre que el tiempo permita continuar disfrutando de la buena música al aire libre.

Tras el arranque de la banda majorera Bocinegro le siguió el grupo conejero Cienmpiés Ni Cabeza cuyos componentes demostraron sobre el escenario su capacidad para fusionar los distintos estilos desde la rumba, el funk, el reggae o el pop.

El compositor británico Aka George, con sus combinaciones de sonidos electrónicos con las melodías tradicionales, comenzó a subir la emoción entre los valientes que se atrevieron a saltar a la arena de la playa de Gran Tarajal. El artistas inglés supo demostrar su calidad artística durante su actuación desenvolviéndose con auténtica pasión sobre el escenario.

Mientras caía un autentico diluvio sobre Gran Tarajal, la banda catalana Muyayo Rif tuvo que esperar un cuarto de hora antes de iniciar su actuación. Mientras los técnicos de sonido y personal se afanaban en proteger los equipos informáticos, columnas y cableado, desde el mismo momento que escampó sus canciones P' alante o Maldita Comedia, donde predominó la crítica social, la reivindicación y el compromiso junto con ritmos urbanos como el punk, ska, o rock pusieron una enorme dosis de energía sobre el escenario.

Música y desierto

El músico y guitarrista de Níger Aboubacar "Anana" Harouna, que fue durante 12 años refugiado, era una de las actuaciones más esperadas en Gran Tarajal donde durante su actuación tuvo guiños hacia los refugiados.

Anana llegó a Bruselas desde Níger en 2006. En la capital belga fundó el grupo Kel Assouf con una propuesta sonora inspirada en la música tuareg, interpretada en tamasheq, la lengua de los nómadas del Sahara, y entremezclada con acordes de otros estilos.

La banda Kel Assouf, con músicos de Ghana, Mauritania, Francia, Mali y Argelia dejó un buen sabor de boca en el Womad majorero. Compartió escenario con los polacos Warsaw Village Band.

La cierre de nuestra edición todavía quedaban varios grupos por subir a los dos escenarios montados sobre la arena de la playa majorera, aunque las miradas en esta ocasión estaban más dirigidas, en muchos momentos, hacia el cielo que a los propios estrados por la amenaza constante de lluvia. Si la misma se aleja, grupos como Pat Thomas & Kawashibu Area Band, 9Bach, Jazzanova Live o el Dj Ras SOS harán las delicias de los asistentes en una perfecta combinación entre música y agua.