La muerte en extrañas circunstancias de la mujer argentina en Puerto del Rosario sigue rodeada de un auténtico misterio. Los investigadores continúan barajando varias pistas para esclarecer las causas del trágico fallecimiento de forma violenta por asfixia. Una de las hipótesis es que el presunto asesino regresó al piso, ubicado en la avenida La Constitución, tras haber acabado con su vida para borrar todo tipo de huellas y dificultar el trabajo de los agentes, según sostienen fuentes próximas a la investigación.

Lorena Mazzeo Olivera (Argentina, 1982) apareció muerta hace algunos días en el interior de la bañera de su casa con el cordón de la ducha rodeando su cuello. Sin embargo, no existen huellas externas de violencia. Este hecho mantiene en vilo a los miembros de la Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) que han dirigido sus pesquisas hacia en entorno de la joven y en los ambiente de ocio nocturno de Puerto del Rosario, que la mujer solía frecuentar. Los conocidos de la periodista argentina señalaron a este periódico que "en las últimas semanas se la veía acompañada de un hombre bastante extraño", aunque no precisaron más detalles y pidieron el anonimato. Sin embargo, este periódico ha podido confirmar que algunos de estos conocidos de Lorena han sido interrogados por la policía.

Los investigadores mantienen que el autor de la muerte de la mujer argentina "tiene una enorme sangre fría. Creemos que regresó de nuevo a la vivienda para borrar las huellas, limpió todo tipo de rastro, se llevó el ordenador y el móvil. Además, al salir cerró la puerta con llave y se las llevó. Ha tratado en todo momento de obstruir nuestra labor de investigación", señalaron a este periódico.

Tras las sospechas policiales de que la muerte pudo haber sido violenta, la juez titular del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Puerto del Rosario, Ana Moreno Valenciano, decretó el secreto de sumario. Todavía no ha ordenado su levantamiento.

También ordenó el depósito del cadáver en la morgue municipal y no ha podido ser entregado a la familia, cuya hermana, la famosa modelo argentina Gabriela Acosta, su madre y una tía que reside en Italia llevan varios días en Fuerteventura no solo para interesarse por los motivos del fallecimiento de Lorena sino para hacerse cargo del cuerpo y proceder a la repatriación del mismo hasta su país de origen.

El resultado de la autopsia realizada por el forense majorero José Rodríguez determinó que la causa del fallecimiento de Lorena fue por asfixia.

La joven disfrutó con su familia de unas vacaciones en Cancún el pasado mes de octubre. Sus amigos en Argentina no dan crédito al fallecimiento de la joven e incluso han puesto en marcha una iniciativa a través de las redes sociales para mostrar la condolencia por el trágico suceso.

Los agentes de la Policía Judicial han cursado varias notificaciones a las empresas de telefonía móvil para que certifiquen las últimas llamadas realizadas y recibidas desde el móvil de Lorena, así como los mensajes a través de whatsapp. Esta pude ser una de las pistas que pudieran esclarecer un suceso que ha generado una honda preocupación en la sociedad de Fuerteventura.