La Audiencia de Las Palmas ha condenado a 16 años y 5 meses de cárcel al maltratador Francisco Borja Ojeda San Juan por intentar asesinar en el barrio de Puerto Lajas, en Puerto del Rosario, a su expareja, a la que tenía prohibido aproximarse, lesionar a su hija y una amiga que intentaron defenderla y amenazar al hombre que la salvó.
En su sentencia, hecha pública ayer, el Tribunal ha tenido en cuenta para fijar la pena de 14 años y 6 meses de cárcel por el delito de intento de asesinato que ya había sido condenado por intentar matar a otra pareja, pero también que ahora lo hiciera ante la hija menor de la víctima y el modo en que sucedieron los hechos, lo que entiende que debe tener un "mayor reproche".
La sala no tiene dudas de que la mañana del 22 de septiembre de 2014 el acusado se acercó a su expareja, que estaba con su hija y una amiga esperando la guagua escolar en Puerto Lajas, y sacó de manera sorpresiva un cuchillo de sierra con el que le asestó varias puñaladas, después de quitarle el móvil de un manotazo cuando trató de pedir auxilio y tirarla al suelo.
Así, el Tribunal expone que la declaración de las víctimas en el juicio le mereció su "absoluta credibilidad, pues explicaron con detalle lo sucedido ese día sin que se apreciara que ninguna de ella faltara a la verdad". Además, hace hincapié en que las puñaladas fueron dirigidas al cuello.
"En el presente caso ha resultado acreditado, sin género de dudas, el ánimo de matar del acusado, tanto por el arma utilizada como por la ubicación de las lesiones y la forma en la que se desarrollaron los hechos", razona el Tribunal en sus fundamentos.
La expareja recibió una puñalada en la zona del cuello y también en el hombro y espalda, llegando a seccionar de forma importante la yugular, señala el tribunal, que hace hincapié en que el acusado utilizó el arma de forma repentina e imprevista: la tenía escondida en la parte trasera del pantalón y aprovechó a tener a la víctima inmovilizada en el suelo para emplearla sin posibilidad de defensa.
En su fallo, el Tribunal ha tenido en cuenta también el agravante de parentesco y de reincidencia, ya que había sido condenado por un delito de intento de homicidio y otro de lesiones en el ámbito familiar.
En relación a las dos circunstancias atenuantes propuestas por la defensa, la ingesta de alcohol y pastillas y la confesión, ambas han sido rechazadas.
El Tribunal no ha apreciado que el acusado tuviera sus facultades afectadas e indica que no se presentó prueba alguna que lo demostrara y tampoco ha admitido la confesión al no reunir los requisitos que se precisan.
Además, del delito de intento de asesinato, al acusado se le ha impuesto una pena de 1 año de prisión por un delito de lesiones, once meses de cárcel por el quebrantamiento de condena, una falta de lesiones y otra de amenazas, si bien se le absuelve de un delito de lesiones.
El procesado, según el fallo, no podrá acercarse a su expareja por un periodo de 24 años y seis meses y a la hija de esta por un tiempo de seis meses y tendrá que indemnizar a la primera con 29.650 euros, a la amiga con 410 euros, mientras que a la menor con 140 euros.
