SEO/BirdLife ha solicitado al Cabildo de Fuerteventura que tome "medidas urgentes" para erradicar la cotorra bulbul cafre (Pycnonotus cafer), incluida por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) entre las cien peores especies invasoras del mundo. La organización alerta ante la "preocupante situación generada tras comprobar su existencia en varios enclaves de la Isla".
En declaraciones a Efe, el coordinador de proyectos en Canarias de la Sociedad Española de Ornitología, Juan Antonio Lorenzo, explicó que los primeros ejemplares de este pájaro cantor documentados en Fuerteventura datan de finales de los noventa y principios de la siguiente década.
En concreto, las cotorras se encontraban en una jaula en unos apartamentos de la localidad turística de Corralejo junto a otras aves exóticas, que debieron escaparse en algún momento dando lugar a que en 2001 se observe un ejemplar con comportamiento territorial.
En 2007 se publicó el "Atlas de las aves nidificantes en el archipiélago canario", coordinado por Lorenzo, y donde ya se mencionan ejemplares de bulbul en la localidad de La Lajita (municipio de Pájara). Diez años después, Lorenzo cree que se está llegando a una situación de efectivos, que califica de "muy preocupante" tras comprobar cómo se empiezan a ver ejemplares desde Corralejo, en el norte, a localidades del centro como Caleta de Fuste o, al sur, en La Pared, Tarajalejo, Las Hermosas, Giniginámar, Costa Calma y Morro Jable.
El bulbul cafre, también conocido como bulbul de caudal roja o bulbul ventrirrojo, es una especie de ave paseriforme de la familia Pycnonotidae. Se reproduce a través del subcontinente indio, incluyendo Sri Lanka, extendiéndose al este de Birmania y partes del Tíbet.
El especialista en aves ha explicado cómo se han ido escapando algunos ejemplares de domicilios, que se han adaptado poco a poco y han conseguido, incluso, "criar dando paso a una expansión paulatina y a asentarse en diferentes lugares". Esta ave forma parte del catálogo español de especies exóticas invasoras, donde se la define como "agresiva", que puede perseguir a otros pájaros. También ayudar a difundir las semillas de otras especies invasoras, además de establecer el deber de controlar su existencia en aquellos lugares donde se asienta.
Un peligro para otras especies
Según Lorenzo, se trata de un ave "más bien omnívora que aprovecha muchos recursos tanto vegetales como animales a la vez que supone un peligro para especies endémicas como las que consumen invertebrados".
La SEO/BirdLife alerta de que estos ejemplares pueden "competir con otras especies nativas de Fuerteventura e insectívoras como el alcaudón o la tarabilla, aunque todo esto habría que estudiarlo".
Por ese motivo, esta asociación conservacionista ha informado por escrito al Cabildo de Fuerteventura con copia al Gobierno de Canarias para que tome medi- das y efectúe un estudio detalla-do para saber cuántos ejempla-res hay, en qué sitios exactamente se encuentran y, a continuación, se tomen medidas para su erradicación.
Lorenzo ha planteado erradicarlas con el trampeo con el objetivo de "capturar el mayor número posible hasta el punto de quitarlos del medio natural y devolverlos a un estado de cautividad que es de donde salieron" y ha insistido en el peligro de "tener aves exóticas que pueden escaparse y asentarse en ambientes insulares con la fragilidad que tienen las islas".
El representante de SEO/BirdLife ha recordado que Fuerteventura es "una isla que mantiene una flora y una fauna muy peculiar, pero con algunas especies exóticas que tradicionalmente no se han podido quitar porque no se ha actuado a tiempo, como puede ser la ardilla moruna". Por este motivo, el ornitólogo considera que "hay que intentar que con estas nuevas especies invasoras no pase como con la ardilla moruna y no se vayan añadiendo artificialidad y especies exóticas en Fuerteventura". Este roedor procedente de Marruecos, está extendido por toda la Isla.
