La ganadería majorera agoniza. Cada año se cierran más ganaderías. Un gran número de empresarios, cuya representación ronda el 80% de la producción lechera y cárnica de la isla, coinciden en que "la ganadería en Fuerteventura es un sector que muere en silencio".

Los ganaderos denuncian que están " hartos y cansados de las promesas de los políticos y sus anuncios de ayudas públicas que nunca llegan en tiempo y forma". Además, añaden, que "la ganadería en Fuerteventura pasa por uno de sus peores momentos históricos".

Uno de los afectados segura que "en los últimos años, hemos cobrado tarde y en partes proporcionales, algo que trastoca el normal desarrollo de nuestra actividad. A esto hay que añadir la ingente cantidad de trámites burocráticos y los cambios legislativos, que suman un impedimento más, así como la gran subida de los alimentos debido gasto realizado por el Gobierno regional de las ayudas al R.E.A. impagos y promesas de cobro de años atrasados, así como grandes proyectos y obras inacabadas que terminan por llevar al límite al ganadero que decide echar el cierre o ser absorbido por otros empresarios".