María José Plata, madre de la niña de 10 años que sufrió un intento de secuestro en el barrio de La Garita, se mostró muy emocionada anoche cuando acudió a la plaza del barrio teldense a una concentración vecinal en demanda de mayor seguridad y declaró: "Estamos muy contentos con las actuaciones de los policías y de la justicia", en relación a la detención e investigación de las responsabilidades judiciales del presunto autor de los hechos, sin añadir nada más por el secreto de sumario del caso abierto por el juzgado número 2 de Primera Instancia e Instrucción de Telde.

La madre de la menor, que venía de los juzgados de Telde y de pasar por su casa, recogió entre lágrimas un ramo de flores que los vecinos querían regalar a su hija Sandra, y todo ello después de que algo más de 200 personas se concentrasen en la tarde noche de este viernes en la plaza, justo frente a la iglesia del barrio de La Garita.

Varias compañeras de trabajo y numerosos vecinos esperaban a María José Plata para expresar todo su respaldo, al tiempo que ella aprovechó para agradecer "el enorme apoyo de los vecinos de La Garita, como de todo Telde".

ESTÁ BIEN. Respecto al estado de salud y a la situación anímica de su hija Sandra, la madre afirmó que "se encuentra bien y cuenta con el apoyo de toda la familia y de varios profesionales".

La pancarta de la concentración decía: ¡Por nuestra seguridad y la de nuestros hijos! El lema de este cartel principal y los de otros pequeños, que portaban varios niños, dejan claro que la petición de casi todos los vecinos es de una "seguridad" que devuelva la tranquilidad a todos ellos, además de la presencia de una Policía Local cercana, amable y de barrio y de que se aclaren las desapariciones de los menores grancanarios Yeremi Vargas y Sara Morales.

Entre los concentrados estaban desde el principio la abuela materna y la hermana mayor de la pequeña Sandra, además de los profesores, la directora y los componentes de la AMPA del colegio público La Garita -del que ella no es alumna-; políticos, vecinos y miembros de diferentes colectivos, entre otros la peña gastronómica El Fogón, el club deportivo Yoñé, la asociación vecinal Punto y seguido, y el Patronato de fiestas La Sal, cuya presidenta, Julia Martel, leyó un manifiesto.

MIEDO. Martel afirmó, antes de la lectura, que existe "cierto miedo e instinto de protección especialmente de los padres. Existe miedo y, al mismo tiempo, una tranquilidad relativa. Es verdad que los niños casi no van a la plaza a jugar -menos solos-, pero tampoco hay psicosis".

Una vecina, que se encontraba cerca de los que portaban el cartel de la concentración, exigió a los concejales presentes en el acto que el Ayuntamiento teldense se comprometiese "a dar más seguridad".

En respuesta a esta intervención, el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Telde, José Antonio Perera, aseguró que la corporación "no es indiferente" y que "ya se ha implicado con una mayor presencia policial en los colegios".

El responsable de la Policía Local, el edil Juan Martel, recordó que una de sus primeras decisiones "fue restablecer la policía de barrios en el municipio, pero este asunto no se resuelve poniendo 100.000 policías, sino que también hace falta colaboración e implicación de las familias y de los colectivos vecinales". Un vecino replicó, entre el público, que "lo que no hace falta es politizar el acto y nuestra iniciativa" ciudadana.