Es una satisfacción y un honor muy grande ser la pregonera de estas fiestas de San Juan de Arucas 2008", afirma Lourdes Ramos Pelayo quien fue la persona asignada como pregonera de este año.

Lourdes Pelayo es, para muchos, toda una institución en Arucas en relación a los nacimientos, ya que fue la matrona que asistió en los domicilios del municipio entre los años 1961 y 1997, además de hacerlo en la clínica de Maternidad que se inauguró pocos años después de que ella ocupase esa plaza y era donde ella misma residía.

Miles de aruquenses pasaron por sus manos. Ella calcula que nacían entre 30 y 50 niños al mes en el municipio. Eran otros tiempos. "También venían a la Maternidad parturientas de otros municipios cercanos, como Moya y Firgas. En la actualidad, no sé a quiénes ayudé a venir al mundo, salvo casos muy concretos. En la mayoría de los casos es porque me lo dicen sus madres o familiares", comenta.

También trabajó en el hospital del Pino de la capital grancanaria desde que se inauguró, en 1964, hasta 1980.

Ramos Pelayo es natural de La Orotava y lleva 47 años viviendo en Arucas. Ella tenía interés por el Magisterio -única carrera que podían hacer las mujeres en esa época-; sin embargo, en ella despertó su vocación por ser matrona. Se formó como tal en la Universidad de Sevilla, ciudad donde comenzó a trabajar a los 19 años y con 23 lo hizo en Arucas, tras conseguir la plaza de matrona que se encargaba de la asistencia pública domiciliaria.

"Yo era muy meticulosa en el trabajo. Iba a las casas, después de que viniese a buscarme en coche un guardia acompañado por un familiar", recuerda Lourdes Ramos, que señala que "trabajaba sola, porque no iban los médicos, y no cobraba un sueldo, sino en función al acto médico (90 pesetas) y por los de beneficencia eran 300 pesetas al mes". Sobre el material de trabajo, la matrona dice que "faltaba mucho, especialmente en los años 60. Yo iba a la farmacia para buscar algodón, gasas... que pagaba de mi bolsillo".

Finalmente, Lourdes Ramos explica que el pregón que impartió en la plaza de San Juan el pasado viernes, como inicio de las fiestas de San Juan de este año, lo dividió en tres partes: "Una en relación al trabajo que hice como matrona de la zona de Arucas durante 36 años; la segunda, estaba dedicada a ensalzar a la ciudad; y una tercera sobre los actos importantes de las fiestas, como hogueras, procesiones y verbenas. Los actos religiosos eran y son muy bonitos, además de muy seguidos por numerosos devotos", concluye.