La crisis económica sigue tornando situaciones. Si hace apenas dos años era casi un milagro ver a una empresa interesándose por una obra del Ayuntamiento de Telde, ahora son decenas las constructoras que se interesan de manera desmedida por conseguir algunos de los proyectos que el consistorio ya ha empezado a distribuir gracias a la nueva financiación estatal.

La falta de actividad y de demanda en el sector de la construcción se antoja como la principal causa que explica este fenómeno. En sólo unos días ya son más de 20 las compañías que se han acercado hasta la Concejalía de Contratación de la ciudad para recabar datos sobre una serie de actuaciones que, a priori, no deberían de llamar la atención.

Se trata de un paquete de 17 intervenciones que están presupuestadas entre 5.000 y 200.000 euros, que se otorgan a dedo o tras un procedimiento negociado y sin publicidad según su importe y que, en definitiva, supondrán diversas mejoras en varios barrios de la ciudad. Las otras 20 obras que costeará Madrid -hasta superar los 17,4 millones de euros que el Ministerio de Administraciones Públicas ha concedido a Telde- se sitúan por encima de esa cifra y llevan un procedimiento de contratación distinto, pero tampoco pasan desapercibidas.

El concejal del área, Agustín Arencibia, es uno de los más sorprendidos por esta avalancha de consultas. "Hay empresas de renombre y de solvencia reconocida que en condiciones normales no se interesarían por los proyectos de bajo coste porque, evidentemente el beneficio es menor, pero eso da una idea de cómo está el mercado".

Otro de los incentivos que tienen las obras financiadas por el gobierno de Rodríguez Zapatero es que deben pagarse en un plazo no superior a los 30 días después de que se haya presentado la correspondiente certificación. El consistorio ya ha iniciado los trámites para licitar todos los proyectos antes de abril. Los cálculos realizados por Contratación prevén que en Telde estas intervenciones darán trabajo a 844 personas.