El PP criticó ayer la posible recompra de Sialsa por el Cabildo de Gran Canaria al entender que esta iniciativa "responde una vez más a la política facilona a la que nos tiene acostumbrados [el actual presidente insular] José Miguel Pérez, que quiere contentar a unos cuantos momentáneamente e hipotecar a todos los grancanarios de cara al futuro".

El portavoz popular, Larry Álvarez, señaló que la adquisición de esa empresa ahora privada "simplemente traspasa los problemas de la misma a las arcas cabildicias generando más gasto público y una pesada losa".

En 2005, la corporación insular, gobernada por el PP, vendió a Kalise Menorquina la central lechera por 12 millones de euros, lo que originó una de las mayores polémicas del mandato con manifestaciones incluidas de los ganaderos de la isla. En los sondeos previos que se han mantenido recientemente, la entidad ha ofertado un precio de salida de 14,6 millones, pero el actual gobierno insular no quiere pagar mas de diez.