La presa de La Sorrueda no dispone de agua para regar desde hace casi dos meses los cultivos de Sardina, Doctoral y Juan Grande pese a las copiosas lluvias que cayeron sobre Gran Canaria a principios de este año. Así lo dijo el presidente de la Heredad Acequia Alta de Sardina, Francisco Ramos. Los socios de la heredad ya se vieron sin agua desde agosto a noviembre del año pasado al quedarse también la presa bajo mínimos.

"La lluvia sólo posibilitó la entrada de algo más de 10.000 horas de agua, ya que aquí llovió menos que en el Norte, Centro y La Aldea", comentó Ramos. El presidente de la Heredad de Sardina indicó que desde hace dos meses han tenido que usar agua desalada. En concreto, el ranchero de la Heredad, Pepe Pérez, apuntó que el cierre de la presa fue el 8 de septiembre.

"La crisis, la competencia y la falta de agua están haciendo difícil el desarrollo de la agricultura", señaló Ramos. "Ahora sólo esperamos que llueva pronto en toda la zona para disponer de agua para seguir cultivando, ya que el agua desalada nos cuesta un poco más", comentó.

Los 300 socios disponen de la presa cuando tiene líquido hasta 12,5 horas de agua para sus cultivos, al igual que los de la Heredad de Juan Grande-Aldea Blanca. Las últimas lluvias no han sido suficientes, aunque sí han sido mayores que en los anteriores cinco años.

La presa cuenta ahora con 2.000 litros de agua, situada bajo la bomba de distribución del líquido. Aunque hubo un tiempo en que se achicaba el agua, "últimamente se ha decidido no hacerlo para que no se seque, y también para que los animalitos y las plantas del entorno continúen viviendo". "La lluvia ha sido tan escasa que hasta las hierbas de la zona ya se han secado", manifestó Francisco Ramos.

La impulsión de agua desalada a la Caldera de Tirajana no afecta a la Heredad, ya que sólo será para la zona alta.