La Mancomunidad del Sureste, integrada por Santa Lucía, Ingenio y Agüimes, ha sido la comarca donde mejores resultados están dando los agentes rastreadores de empleo. Así lo manifiestan Lucía Quintana, Nayra Domínguez, María Raquel Sánchez y María del Pino Pérez, quienes han visitado, desde junio, 1.211 empresas bajo la coordinación de Federico Noval.

"Esta es una experiencia que ha sorprendido a los mismos empresarios, porque han visto que nosotras les ofrecemos también asesoramiento jurídico, de subvenciones e información sobre otras necesidades", comentan. "Han acogido positivamente la iniciativa del Cabildo y de la Mancomunidad, porque prestamos asesoramiento gratuito", indica María Raquel Sánchez.

"Los agentes rastreadores de empleo se enmarcan dentro del Pacto local de Gran Canaria por el empleo", apunta el coordinador Federico Noval. Así las visitas tratan de ofrecer un trato personalizado a los empresarios y fomentar el empleo.

"El hecho de que se haya generado un empleo diario en esta situación de crisis es muy importante, porque, además, las empresas han podido contratar a parados con el perfil que necesitaban", comenta Nayra Domínguez. "En cualquier caso, las empresas consolidadas consideran que también deberían contar con ayudas públicas", añade.

Todas resaltan que de las visitas a las más de 1.200 empresas del Sureste "se desprende que cada empresa es un mundo, porque las necesidades son muy variadas". Algunas de las demandas se refieren a información, ayudas, subvenciones, nuevas tecnologías y gestión empresarial. "Muchas consideran que debe producirse un cambio en la legislación laboral al entender que el coste en Seguridad Social es elevado", expresan.

En cuanto a los empleos generados, la mayoría son del sector de servicios y comercial. Las agencias de desarrollo local de Santa Lucía, Ingenio y Agüimes disponen de bolsas de empleo, adonde remiten los trabajos generados. También están conectadas a la bolsa insular de empleo. "El objetivo fundamental es que los empleos generados en el Sureste sean ocupados por parados de la comarca", manifiesta María del Pino Pérez. "La actitud de las empresas es positiva, ya que están luchando ante la situación de crisis y sin disponer de los créditos que necesitan", indica Lucía Quintana. "La realidad es muy dura para las empresas familiares, que se mantienen porque no les queda otra", apunta Nayra Domínguez.

En estos momentos, el Sureste tiene 17.454 parados registrados, 2.441 más que hace un año, lo que representa un incremento del 16,26% en el número de desempleados de la comarca.