La asociación Paco Bello somos todos, que acoge a familiares y amigos del cura de La Garita fallecido hace ahora siete meses, anunció ayer una campaña de recogida de firmas para hacer factible el proyecto de colocar dos murales y otros tantos medallones en recuerdo de su figura. La asociación se inscribió el jueves en el registro del Gobierno de Canarias y este viernes avanzó públicamente sus primeras líneas de trabajo. La entrega de una carta a los dos obispos de las diócesis del archipiélago -Francisco Cases y Bernardo Álvarez- invitándoles a participar en sus propuestas y el encuentro que mantuvieron con el alcalde Francisco Santiago han sido dos de los primeros pasos dados.

Su humanismo, su canariedad y su fe en Jesús de Nazaret fueron algunos de los aspectos que recalcaron de la figura del párroco, que se hizo muy conocido en las islas por su defensa a ultranza de los colectivos de gays, lesbianas y transexuales al colocar sus banderas identificativas en la iglesia de La Garia, cosa que también hizo con la de las siete estrellas verdes.