Las concejalías de Obras Públicas y de Contratación de Telde han conseguido desbloquear el ansiado proyecto de rehabilitación de la centenaria ermita de Cazadores, el único templo de montaña de las medianías de Telde que está pendiente de recuperación tras los arreglos ejecutados en los primeros años de este siglo en los pagos de Lomo Magullo y La Breña.

El concejal Agustín Arencibia indicó días atrás que ya se ha rescindido el contrato que en 2009 se suscribió con la empresa Lanzarotrans para ejecutar las obras de realzamiento del citado inmueble, asignadas por un precio muy inferior al que habían salido a concurso.

La constructora se comprometió a ejecutar esta actuación por 179.400 euros pese a que la intervención se quería licitar por un importe de 256.000 euros (un 50% más). Meses después, Lanzarotrans argumentó que no podía hacer frente a los trabajos y se inició una pugna entre ambas partes que concluyó hace un par de semanas con la rescisión definitiva del contrato.

Esta diferencia económica ya suscitó en su día los primeros gestos de desconfianza en círculos próximos al departamento de Contratación de la institución local, que no entendían cómo se podía asignar el proyecto con una baja de ese calibre. Con todo, el grupo de gobierno de NC, el PSOE y el CCN optó por elegir a la citada empresa y hasta llevó a cabo la colocación de la primera piedra el 26 de septiembre de 2009, haciéndolo coincidir con las fiestas del pago cumbrero. Seis meses después, los obreros no habían aparecido por el lugar. Y luego un temporal que se produjo hace ahora algo más de un año terminó por derrumbar la espadaña de la ermita.