La conformación del nuevo gobierno de Telde sigue siendo una tarea harto complicada. El Partido Popular (PP), que sigue disfrutando a día de hoy del mayor número de opciones para levantar el bastón de mando, ha optado ahora por girar la cabeza hacia Ciuca en busca de un socio que junto con Más por Telde le garantice al menos la investidura de su candidata María del Carmen Castellano, en el pleno del sábado 11 de junio.
A priori, el acuerdo más factible era un pacto cuatripartito compuesto por los populares, CC, Más por Telde y el PSOE, pero los titubeos y las reticencias de las que ayer seguían haciendo gala estos últimos han hecho que esta opción, sin quedar del todo descartada, pierda puntos. Estos tres partidos minoritarios, con dos ediles por bando, se vieron este miércoles en una reunión en la que se pudo constatar que a los socialistas y a su líder José Alcaraz les está resultando una misión muy difícil anunciar su apoyo a la candidata conservadora.
Así las cosas, la líder del PP parece haber activado una alternativa que, como mínimo, le garantizaría ser la nueva alcaldesa de la ciudad, pero que luego le presenta un futuro más oscuro. La maniobra consistiría en meter en el gobierno a los cuatro ediles de Ciuca -formación con la que ayer se vio- y en disfrutar del apoyo ya anunciado de Más por Telde en la investidura. Así sumaría catorce votos.
El problema estriba en que ese sería el único respaldo que el PP recibiría de Más por Telde, donde tienen bien claro que no apuntalarán la presencia de los hermanos Reyes en ningún pacto. Otra variante a esta combinación la ofrece CC. Los nacionalistas se reúnen hoy para decidir si gobernarían con PP y Ciuca, cuestión difícilmente digerible si la pretensión de Guillermo Reyes es reclamar Urbanismo.
El PSOE, por su parte, intentó ayer, sin éxito, buscar otros aliados en una extraña quiniela en la que entrarían Nueva Canarias y otras dos formaciones.
