Dos explosiones de gas propano en el hotel Cordial Mogán Playa dejaron ayer un balance de dos heridos en estado crítico por las quemaduras sufridas, así como otros cuatro graves, y 17 de carácter leve por crisis de ansiedad e intoxicación por inhalación de humo.

El motivo de las deflagraciones, ocurridas poco antes de las 9.00 horas, fue presuntamente una fuga de gas mientras se cargaba el combustible a un depósito del hotel por parte de un camión cisterna mediante su correspondiente manguera.

El suceso obligó a desalojar a casi un millar de personas, entre el centenar de trabajadores que se hallaban en ese momento en las instalaciones hoteleras y los 862 clientes que en el día de ayer estaban alojados.

Todos pudieron volver a las habitaciones y a sus puestos de trabajo pasadas las cuatro de la tarde, después de que los técnicos asegurasen de que no había daños en las estructuras del inmueble, ni ningún tipo de peligro, de que los bomberos apagasen las llamas y ventilasen las zonas afectadas, y de que las trabajadoras limpiasen todos lugares que se ensuciaron por el humo y los trabajos de emergencia.

"El ruido de cada explosión era como un golpe seco. Se produjo una gran humareda negra tras el fogonazo y la llamarada", explicó un operario que iba a comenzar a trabajar en la colocación de un toldo en una vivienda cercana al hotel, que vio lo sucedido cuando se acercaba en su coche a la calle trasera donde estaba el camión cisterna que suministraba el gas. "Me impresionó ver a tanta gente llorar y con las manos en la cabeza".

Poco después de la humareda y el efecto sonoro de los estallidos, el personal del hotel Cordial Mogán Playa alertó de forma inmediata a todos los huéspedes, muchos de los cuales se encontraban desayunando en el comedor. "Fue un desalojo brillante y de forma correcta y rápida", aseguró Nicolás Villalobos, director general del grupo hotelero Cordial Canarias.

Tras la llamada de alerta por lo ocurrido, un gran despliegue de efectivos de emergencia llegó al hotel y ocupó las entradas del inmueble y la calle principal, y trabajó en espacios próximos, como en un parquin, donde Cruz Roja montó un hospital de campaña, y en el campo de fútbol, donde aterrizaron y despegaron los helicópteros con los heridos.

Cientos de clientes del hotel estuvieron frente al hotel y en un lateral de un centro comercial. Otros muchos esperaron en el complejo de apartamentos, colindante al hotel y que es de la misma cadena, hasta que pudieron volver a sus habitaciones.

Efectivos

Tres unidades de bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, del parque de Puerto Rico, intervinieron en el complejo hotelero, como miembros de Cruz Roja; dos vehículos de intervención rápida (VIR), cinco ambulancias del Servicio de Urgencias Canario (SUC) y al menos dos de una empresa privada; dos helicópteros del SUC y otro del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES); personal del centro de salud; y agentes de las Policías Local y Canaria, de la Guardia Civil, de la Policía Judicial y de Protección Civil.