El consejero de Política Territorial, Domingo Berriel, comparecerá a petición propia en el Parlamento en el próximo periodo de sesiones para explicar la posición del Ejecutivo en relación con los ataques que ha recibido desde los empresarios de Gran Canaria por el freno a inversiones en la isla, a través de proyectos que están paralizados desde hace más de diez años.

"Compareceré en el Parlamento para explicar de forma pormenorizada los problemas de los proyectos más relevantes que son objetivo de la queja mediática de los empresarios y explicaré cómo el Gobierno está trabajando para resolver la situación", explicó ayer Berriel. El consejero reiteró que el principal compromiso del Ejecutivo es agilizar los trámites, "lo que no significa que se vaya a rebajar la seguridad jurídica y el cumplimiento de los principios de igualdad y legalidad", advirtió.

No obstante, el titular de Política Territorial matizó: "No tenemos constancia de quejas empresariales, sí tenemos dos o tres proyectos a los que estamos intentando dar una solución en el planeamiento". Un ejemplo es el puerto deportivo de Bahía Feliz, una infraestructura que ya tiene los permisos pero que no está vinculada a plazas alojativas concretas.

Por su parte, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, pidió ayer que la Cotmac, "que es un órgano técnico, aplique la misma vara de medir para Gran Canaria que para el resto de las islas y que agilice y flexibilice la interpretación de normas en lo posible para que las inversiones puedan salir adelante".

Aunque admitió que el Cabildo grancanario "tiene competencias en determinados planes territoriales y que hay algunos que vienen retrasados desde hace años", Bravo de Laguna aseguró que "los temas que ha parado la Cotmac no derivan de planeamiento que sea responsabilidad del Cabildo".

Sin embargo, Berriel no entiende la preocupación del presidente del Cabildo y garantiza que la Cotmac "trata todos los asuntos con la misma objetividad y transparencia sean de la isla que sean". Por ello, "la preocupación de Bravo de Laguna es innecesaria, debe estar tranquilo porque nadie puede acreditar que la Cotmac discrimine los asuntos en función de la isla que sea", añadió.