El barranco de La Dehesa, que baja por un flanco del pueblo de Cardones, Arucas, sufre desde hace casi diez años un tsunami permanente de residuos peligrosos que ha ido depositando el empresario Juan Socorro Medina, abarcando miles y miles de metros cuadrados, sin que los verdaderos propietarios de esos terrenos hayan podido frenar esta monumental marea de chatarra, productos tóxicos y maquinaria en ruinas hasta el pasado jueves, día en el que el Juzgado de Arucas por fin mandó parar.

Ayer viernes, uno de los propietarios de los solares afectados por este okupa en formato vertedero, entraba por primera vez a parte de su finca para inspeccionar lo que durante todo este tiempo ha permanecido cerrado con candados y vigilado por unos enormes perros.

Y el panorama es desolador. Son tractores desvencijados, restos de camiones, decenas de neveras, mobiliario, y bidones de aceites y otros productos considerados por la propia Agencia de Protección del Medio Urbano y Natural como tóxicos, lo que le ha supuesto una sanción de 12.000 euros por este motivo, y otra de 9.000 euros por el resto de los residuos que se pierden donde la vista alcanza hasta el mismísimo fondo del cauce del barranco.

Estas sanciones están publicadas en 2007, pero no fue hasta cinco años después, es decir esta semana, cuando se ha encontrado a Juan Socorro Medina, un habitual en Arucas al que incluso el Ayuntamiento, a pesar de recibir decenas de escritos para darle conocimiento del asunto, ha contratado el traslado de los residuos de las podas en el municipio. Para tirarlas también allí.

Uno de los dueños explicaba, entre baldes de cal muerta y el goteo del aceite de los bidones hacia la capa freática del subsuelo, que para lograr acceder a sus terrenos se ha tenido que cargar de paciencia, porque la primera denuncia policial por estos hechos data de 2003, y descargarse de un buen monto monetario. Y de hecho, otros propietarios no han podido desalojar las consecuencias del síndrome de Diógenes en formato monumental del empresario Socorro Medina, que se encuentra ahora depositando más maquinaria gruesa en los barrios aruquenses de Santidad y Los Portales. Socorro Medina está obligado a restaurar lo roto, algo que dudan los afectados.