El obispo Francisco Cases animó ayer a hacer frente a la crisis económica, que está haciendo sufrir a mucha gente, con la solidaridad y la esperanza, poniendo como ejemplo la labor de Cáritas Diocesana. Así lo expresó en la homilía que pronunció durante la emotiva coronación canónica de la imagen de Nuestra Señora de Guía, tras destacar las coincidencias entre la visión del profeta Daniel, en la que el pueblo de Dios, exiliado en Babilonia, sufría las consecuencias los imperios de su tiempo.

Cases destacó la visión de Daniel que vio "bajar del cielo cuatro bestias, que las describe con nombres de animales: un león, un oso, un leopardo y el cuarto, que no le pone nombre de animal, dice que es una bestia. Eran alusiones a los representantes políticos y de imperios, que todo lo destrozan, son inhumanos, no tienen corazón, que hacen daño a las personas y que habían ido dominando al pueblo de Dios", señaló, recordando que todavía no había llegado "el definitivo poder de Roma".

"Tenían la conciencia de que el imperio y los poderes de este mundo eran poderes que destrozaban", añadió. El obispo destacó que en la visión de Daniel también bajaba del cielo un Hijo del Hombre, significando que "a las bestias -los poderes- se les quita el poder y al Hijo del Hombre se le dio todo el poder, honor y gloria".

"Es una historia feliz. Pero, ¿no creen que aquellos imperios y poderes que dominaban a las personas no los tenemos hoy? ¿No tenemos hoy el poder económico, con la prima de riesgo, con el movimiento de las bolsas y de los bancos, con el dinero que va y viene, que no sabemos de qué bolsillo sale y en qué bolsillo entra, que lo destrozan todo y que están destrozando muchas vidas?". El prelado canariense advirtió también de la existencia de la violencia física, que, además de las guerras que hubo en Libia y ahora en Siria, "se reflejan en ámbitos tan sagrados para nosotros como la familia, el sitio del amor".

"Tenemos la violencia machista, la violencia doméstica, que destroza a las personas", apuntó.

Igualmente, Francisco Cases indicó que "el poder político, que debe luchar por la justicia humana, no consigue sujetar al poder económico, porque muchas veces está aliado con él, tampoco consigue dominar la violencia física. Son los poderes de hoy que tienen una característica: son inhumanos".

En tal sentido, el obispo invitó "a seguir a Cristo, que fue coronado con una corona real, que sigue hoy sacrificado y solo reina en los corazones que le dejan reinar, y en el que más reinó Jesús fue en el corazón de su Madre". Para Cases, el canto del Magníficat -texto del Evangelio leído por el anterior párroco Pedro Perdomo- que hizo María cuando visitó a su prima Isabel tiene las mismas características de la visión de Daniel, aunque sin representaciones de bestias.

El poder del servicio

El obispo insistió que "María llama a Dios el Poderoso. Nosotros estamos tentados a ver a Dios en los poderes de este mundo. Pero María dice que no hay más poder que el de Dios, que derriba del trono a los poderosos y eleva a los humildes". "María nos da la clave: el poder de Dios no es el dinero, ni el poder y la fuerza física, ni el poder político. El poder de Dios es el poder de la humildad, de la pobreza, de la misericordia y el poder del servicio", insistió.

Para el prelado canariense "en este momento presente es importante aceptar esas pautas de comportamiento". Cases puso como ejemplo "la confianza que se deposita hoy en Cáritas, no solo por la solidaridad, sino por la generosidad y fraternidad de mucha gente anónima". El obispo concluyó haciendo una llamada a todos los presentes a la solidaridad y a la esperanza "para que se multipliquen las personas que sean humanas".

Tras la homilía los niños ofrecieron sus compromisos por la paz, por evitar los insultos y usar el diálogo para resolver sus problemas. La parroquia entregó un pergamino simbólico a la Virgen, en el que se daba constancia de los 11.926,64 euros que había recaudado en este tiempo de preparación de la coronación canónica de la patrona de Guía. El destino de dicho dinero será para una casa de maternidad de Zimbabue, con 9.431 euros, a la que se enviará también un cuadro pintado por Juanita López; y los otros 2.493,17 euros para Cáritas Diocesana de Canarias, para hacer frente a las crecientes necesidades de los más pobres a causa de los recortes.

Asimismo, la parroquia de Santa María de Guía ofreció sus logros y su compromiso de afrontar sus deficiencias. Fue sobre las 13.20 horas cuando el obispo procedió a poner las antiguas coronas restauradas al Niño Jesús y a la Virgen de Guía, mientras el párroco Higinio Sánchez instaba a cada una de las personas que llenaban el templo "una corona al Señor y a la Virgen desde lo más profundo de sus corazones".

Tras la emotiva coronación canónica los feligreses irrumpieron con largos aplausos y vivas a su patrona, mientras otros devotos lloraban de dolor y alegría por vivir tal acontecimiento. La misa, en la que participaron, además del obispo, 19 sacerdotes, siguió su desarrollo hasta las dos de la tarde, momento en que ese descubrió una placa del día de la coronación. La ceremonia concluyó con el himno a la Virgen de Guía Eres de Gran Canaria y con el pase de los curas y devotos por delante de la imagen.