El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, junto a la consejera del Cabildo de Juventud e Igualdad, María del Carmen Muñoz, recibieron ayer en el salón de plenos del Cabildo de Gran Canaria a 25 jóvenes de diferentes comunidades autónomas de España que participarán en la recuperación de la finca de Osorio, situada en el Parque Rural de Doramas.

El objetivo del campo de trabajo es que los jóvenes colaboren en actividades para la recuperación de senderos y plantaciones de la finca de Osorio, propiedad del Cabildo, y conocer los medios rurales. Además el grupo va acompañado de tutores que les guían en visitas a diferentes zonas turísticas de la isla como Arucas, Maspalomas y Tejeda y asisten a talleres sobre la violencia de género o charlas de ayuda al refugiado. Los participantes son jóvenes con edades comprendidas entre 18 y 30 años, que han aportado 90 euros para participar en las jornadas, que tienen lugar desde el 16 al 27 de julio.

Los gastos corren por cuenta del Gobierno canario y es el único proyecto de esas características que financia en la provincia de Las Palmas desde el año 2010. La cifra total asciende a 8.000 euros, en los que van incluidos transporte por las islas, alojamiento, comidas, material y excursiones. Las actividades están supervisadas por un director del campo y dos monitores: Javier Guerra, Gerardo Rodríguez y María Jiménez Ortega, que guían a los participantes en tareas como la plantación de laurisilva en la finca de Osorio. También tratan de mejorar las plantaciones propias del parque rural Doramas y su red de senderos. La jornada se inicia sobre las 08.30 horas y se programan las actividades del día. Y después del mediodía comienzan las actividades de ocio como talleres, juegos, actividades deportivas o charlas.

Una joven participante del proyecto, Alina Celisceva, contó por qué había decidido participar en el campo de trabajo de Osorio: "Soy letona y llevo cinco años estudiando en la Universidad de Valencia. Como el año que viene me voy de Erasmus elegí participar en el campo de trabajo para despedirme de España a lo grande. Además creo que estos campos de trabajo son una oportunidad para conocer gente y visitar otros lugares a los que no había ido, como las islas".

Javier Carlos Rodríguez, otro participante, comentó: "Me apunté porque no quería estar en casa todo el verano, así que aprovecho para hacer actividades de voluntariado y ayudar a la comunidad".