El Consorcio inicia el cambio de imagen del Sur. La construcción de sendos bulevares en la Avenida de Gran Canaria y en la Plaza Miramar dará otra visión turística al entorno del Templo Ecuménico y la Plaza Maspalomas.
La Plaza Miramar y la Avenida de Gran Canaria, que dan acceso al Paseo Costa Canaria y a la Playa del Inglés, serán los dos primeros rincones de la zona turística que cambiarán radicalmente su fisonomía y aspecto cuando se ejecuten los últimos proyectos que el Consorcio Urbanístico para la Rehabilitación de las Zonas Turísticas de San Agustín, Playa del Inglés y Maspalomas ha sacado a licitación pública.
Las obras en la Avenida de Gran Canaria se han presupuestado en 484.873 euros. Consistirán en el acondicionamiento de un atractivo bulevar en el lateral derecho de la vía con el objetivo de recuperar un margen de la calle para facilitar el paseo turístico y el desarrollo de pequeñas actividades temporales.
En estos momentos esa zona urbana comprendida entre la Avenida de Italia y el Paseo costero es un área degradada y obsoleta de aparcamientos al aire libre. Pero es también uno de los principales accesos turísticos a la Playa. Su actual diseño y orografía con aceras escondidas y muy reducidas obliga a los peatones a circular de forma peligrosa por medio de la calzada.
Las obras "buscan dar un mayor protagonismo a los peatones frente a la masificación de vehículos que suele existir en los accesos a la costa", afirma su gerente, César Muñoz.
Por su parte, el segundo aparcamiento que conecta la Plaza Maspalomas y el Templo Ecuménico, está presupuestada en 505.031 euros. "El objetivo del Consorcio es ir introduciendo modificaciones urbanísticas puntuales, básicas pero urgentes, que contribuyan a mejorar la imagen de nuestro entorno turístico, dotando de seguridad y confort al tránsito por el mismo", afirma César Muñoz.
Estas actuaciones se llevarán a cabo en coordinación con otras acciones de carácter municipal como reasfaltados y canalizaciones de pluviales, con el fin de evitar futuras molestias para los usuarios.
El Consorcio, gracias al empuje del Ayuntamiento, el Cabildo de Gran Canaria y la colaboración de los gobiernos central y autonómico, pretende dar una imagen más amable para el visitante.
